Más de 31.000 millones: el peso de la moda en la guerra comercial EEUU-China

Hasta 31.056 millones de dólares es la factura que puede llegar a pagar la moda en una supuesta (o no tan supuesta) guerra comercial entre China y Estados Unidos. La llegada de Donal Trump a la Casa Blanca no ha tardado en traer las primeras consecuencias, y el anuncio del presidente de imponer los primeros aranceles al gigante puede costarle caro a la moda. Con la mayor parte de las cadenas de suministro de la moda deslocalizadas en el exterior, una represalia del Ejecutivo popular chino afectaría al American way of life representado por Levi Strauss, Gap o Nike, que dependen de las importaciones asiáticas.

Entre enero y noviembre de 2024, según datos de la International Trade Administration de Estados Unidos, el país importó textil y moda acabada por valor de 112.920 millones de dólares, un 2,4% más que en el mismo periodo del año anterior. En el conjunto de 2023, el último ejercicio con datos completos para todo el año, las compras estadounidenses de moda al resto del mundo cerraron con un valor de 118.804 millones de dólares.

La potencia yankee se alza como el gran consumidor mundial, no únicamente de moda. A cierre de 2023, las importaciones mundiales del gigante superaron por segundo año consecutivo los tres billones de dólares, siendo la moda responsable de un 3,7% del total. A pesar de que la moda no representa un peso pesado de la factura estadounidense con el mundo, el país sí que se juega en esta guerra un discurso construido en base a iconos estadounidenses que, de ver afectada su cadena de suministro, podrían enfrentar problemas en la distribución y comercialización en Estados Unidos.

La moda representa un 7,2% de las importaciones estadounidenses procedentes de China

China se alza todavía como el gran proveedor de moda para el país. Las compras estadounidenses al gigante asiático alcanzaron 426.885 millones de dólares en 2023, de los cuales un 7,2%, hasta 31.056 millones de dólares, son artículos de textil y moda. Aunque el país yankee ha ido reduciendo su dependencia progresivamente con China (en favor de otros países como México), la moda todavía se alza como un sector clave para las relaciones entre ambos.

En los once primeros meses de 2024, además, las compras de moda estadounidenses a China ya habían alcanzado 30.054 millones de dólares, un 4,2% más que en el mismo periodo del año anterior. El gigante asiático se sitúa además muy por delante de los siguientes grandes proveedores: Vietnam (con 15.655 millones de dólares), India (9.811 millones de dólares) y Bangladesh (7.000 millones de dólares).

El progresivo intento de Estados Unidos de reducir su dependencia de suministro de China se ve especialmente en la evolución desde antes de la pandemia. Aunque a cierre de los once primeros meses de 2024 las compras de Estados Unidos al gigante asiático hayan aumentado, estas se sitúan un 34,3% por debajo de las registradas en 2018. Ese año, la potencia compró artículos textiles y de moda a China por hasta 123.886 millones de dólares.

China es el único país que ha reducido su peso en la cartera de proveedores de Estados Unidos

En paralelo, el peso de las importaciones de otros países, especialmente del continente asiático, ha ido en aumento desde ese mismo año. El mayor incremento lo ha registrado Camboya, donde las importaciones estadounidenses de moda han pasado de 2.609 millones en 2018 hasta 4.276 millones de dólares en 2023, un 63,8% más. En Vietnam, el segundo mayor proveedor de moda para el país, la cifra ha aumentado otro 20,6%, mientras que en India lo han hecho un 18,6%.

Por regiones, la Asociación de Naciones del Sudeste Asiático (Asean), formada por Myanmar, Brunéi, Camboya, Filipinas, Indonesia, Laos, Malasia, Singapur, Tailandia y Vietnam, se alza con gran parte de las compras estadounidenses de moda, con importaciones por 27.285 millones de dólares entre enero y noviembre de 2024. Los países del Tratado de Libre Comercio entre Centroamérica y los Estados Unidos (Cafta), por su parte, se alzan con importaciones por valor de 7.567 millones de dólares mientras que Canadá y México, a través del tratado comercial de Norteamérica (Canadá y México) acumulan 7.041 millones de dólares.

La Unión Europea es la última gran región de la lista (a excepción de los países africanos) de la que Estados Unidos importa más moda, con importaciones de hasta 6.564 millones de dólares). Italia se alza como el primer gran proveedor para Estados Unidos de la Unión Europea, con ventas de textil y moda por 2.821 millones de dólares.