Entorno

La marroquinería en Cataluña firma el convenio sectorial para los próximos tres años

Modaes

15 jul 2015 - 12:51

Patronal y sindicatos firman el nuevo convenio de la marroquinería para Cataluña. Ambas partes sellaron ayer el documento definitivo después de haber alcanzado un preacuerdo a finales de junio y haber concluido el redactado. En el nuevo convenio se recoge, tal y como estaba previsto, alzas salariales del 1% para 2015 y del 1,2% para 2016 y 2017.

 

Además del alza salarial para los próximos tres años, el acuerdo también establece una cláusula de revisión, que garantiza una subida del Índice de Precios al Consumo (IPC) hasta el 2,25%. Es decir, siempre que el IPC sea superior a la subida salarial pactada, se aplicará el incremento del indicador.

 

En cuanto a la flexibilidad, el acuerdo incrementa el número de horas al año, hasta el 10% de la jornada anual. Se pasará así de un paquete de 130 horas a uno de 176 horas. La empresa dispone de estas horas para gestionar las épocas punta de producción. La hora extra se compensa, a partir de la décima, al precio de 1,5 de las horas habituales si es entre semana y al precio de dos euros si es en fin de semana.

 

En el apartado económico, el pacto incluye también un alza del 4,5% en el valor de la póliza de seguros, así como un aumento de las ayudas escolares de hasta 101 euros anuales. Por otro lado, patronal y sindicatos han acordado elevar un 5% el valor de la hora extra.

 

Cataluña es uno de los enclaves más importantes de la industria española de la marroquinería. El sector emplea en la autonomía cerca de 2.000 trabajadores, la mayoría de los cuales se concentran en las plantas de producción de Louis Vuitton y Loewe. La compañía francesa cuenta con cuatro centros de producción en Cataluña que emplean a alrededor de 1.200 trabajadores.

 

Loewe, por su parte, tiene una plantilla de una treintena de personas, aunque opera con talleres externos en la zona que suman un centenar de trabajadores más. Tous es otra de las empresas con producción de marroquinería en la región, con un taller que emplea a unas treinta personas. El resto de las compañías del sector son pymes de entre dos y doce empleados.