Entorno

La crisis convierte a la moda en un sector atractivo para los inversores

Sarah García

21 may 2012 - 04:40

Las enseñas de moda interesan. En lo que va de 2012 se han producido entre diez y doce operaciones corporativas relacionadas con el sector y, en los últimos años, han sido muchas las enseñas que han sido adquiridas por inversores tanto industriales como capitalistas. Este cambio de paradigma que se lleva dando desde hace algún tiempo se ha impulsado más todavía, si cabe, con la actual coyuntura.

 

“En este contexto es normal que siga habiendo interés por las marcas de consumo europeas, ya que tienen prestigio”, explica Vicente Bosque, socio director de la firma de asesoramiento en fusiones y adquisiciones OnetoOne Capital Partners.

 

En este sentido, Borja Oria, asesor financiero de Arcano, destaca varios puntos por los que las empresas de moda despiertan el interés de los inversores. “En primer lugar, las compañías son atractivas por la fuerte consolidación del mercado; hay muchas enseñas pequeñas y pocas grandes, por lo que existe una alta posibilidad de unir empresas”, apunta Oria.

 

Y añade: “la globalización ha hecho que en los planes de la mayoría de compañías esté la internacionalización y la expansión en otros países y eso, unido al potencial del ecommerce y del mcommerce, hacen de las empresas de moda un activo muy atractivo para los inversores”.

 

Además, Oria subraya la importancia de una característica de las empresas de moda como otro de los puntos clave de su atractivo. “Cuando el sector va bien, estas empresas son grandes generadoras de caja, por lo que también son interesantes”, explica.

 

Para el asesor financiero de Arcano, las operaciones que se realizan se podrían dividir en dos. Las primeras son las que un fondo de capital riesgo u otra compañía adquieren una enseña en situación concursal o preconcursal. En este caso, según Oria, “son marcas con un prestigio y un potencial, pero que estaban excesivamente apalancadas”. Y añade: “si a esto se le suma un descenso del consumo, el final es predecible”.

 

La compra por parte de YGM Trading de Aquascutum, la de Bonmarché por parte de Sun Capital Partners o la de Barneys por parte dos de sus acreedores serían tres ejemplos de este tipo de operación.

 

Por su parte, Vicente Bosque piensa que son tres los tipos de movimientos corporativos que se han llevado a cabo en estos últimos meses.

 

En primer lugar, los movimientos de conglomerados europeos que desean seguir creciendo mediante el incremento de su portafolio de marcas. Un ejemplo de ello es la compra de Bulgari por parte de LVMH.

 

En segundo lugar, las operaciones de conglomerados asiáticos que quieren seguir acercándose al consumidor con la adquisición de marcas europeas para desarrollarlas en los mercados asiáticos, como es el caso del grupo Li & Fung que se ha hecho con el control de numerosas firmas como Gieves & Hawkes, Robert Clergerie y Sonia Rykiel.

 

Finalmente, el socio director de OnetoOne coloca a las operaciones de inversores europeos que encuentran valor en adquirir marcas de prestigio en dificultades para reestructurarlas y volverlas a la rentabilidad. Un caso que sirve de ejemplo es el de la familia Mittal, que se hizo con Escada.

 

Desde Arcano subrayan que en los próximos años continuarán realizándose operaciones como las que se han venido haciendo tanto a nivel nacional como internacional. Según Borja Oria, el potencial de crecimiento en países emergentes sumado al gran desarrollo que está experimentando el ecommerce hacen de la moda un sector atractivo en el que seguir invirtiendo.

 

En el caso del mercado español, Oria destaca que hay muchas empresas que lo están haciendo muy bien y que son esas mismas las que suscitan interés de los inversores. No obstante, la dependencia de muchas de ellas del mercado doméstico hace que ese tipo de operaciones se retrasen hasta que pase la incertidumbre actual y la situación se estabilice.