Christel Delbergue (EuroCommerce): “Ahora es momento de implementar lo que se ha legislado”
La directora general de la patronal del comercio europea EuroCommerce, Christel Delbergue, analiza los principales retos y oportunidades del sector textil en Europa a apenas un mes de un cambio en la eurocámara con las elecciones.
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29 may 2024 - 05:00
Con las elecciones europeas a la vuelta de la esquina, el mandato que más ha legislado el sector del textil en Europa llega a su fin. Un cambio en el panorama político europeo podría desestabilizar todas las normativas aprobadas, así como paralizar las que todavía están en medio de los procesos necesarios. Christel Delbergue, directora general de la patronal del comercio europea EuroCommerce, analiza los principales retos y oportunidades del sector textil en el nuevo panorama, así como la importancia de empezar a implementar todas las leyes que se han aplicado en los últimos meses.
Pregunta: ¿Cuáles son los principales retos a los que se enfrenta la industria textil en Europa ahora mismo?
Respuesta: La situación económica es muy complicada, hay cada vez un menor crecimiento y aunque la inflación se ha ido reduciendo poco a poco el sector del retail ha estado golpeado duramente, aunque vemos una gran polarización dentro del sector. El lujo y las grandes empresas lo están llevando bien, pero el problema está en la parte media del mercado, donde hemos visto una competición feroz. El clima dentro del comercio también ha estado impactado por la inflación y el elevado coste de la vida, ya que estamos viviendo un momento en el que muchos consumidores han preferido ahorrar dinero y no gastar o, como mínimo, retrasar el gasto. A todo hay que sumarle las grandes disrupciones que hemos visto en los países no europeos, especialmente en China, que han elevado la competitividad de manera generalizada.
P: ¿Y las mayores oportunidades?
R: Se han visto muchas oportunidades en relación con una parte del sector que está invirtiendo en digitalización, sostenibilidad y en habilidades. En el plano de la digitalización se están haciendo muchas inversiones para mejorar, especialmente, la experiencia del consumidor, mientras que en el plano de la sostenibilidad se apuesta sobre todo por la circularidad. En habilidades todavía hay un enorme reto para atraer talento y empleo a corto plazo. La legislación va a ayudar a crear oportunidades porque da certeza legal para saber cómo actuar en un sector tan amplio y que esta responsabilidad no caiga únicamente en manos de las grandes empresas.
En la parte media del mercado, hemos visto una competición feroz
P: Las elecciones europeas se acercan cada vez más, ¿cómo podría afectar un cambio en el Parlamento a las diferentes legislaciones que se están tramitando?
R: El sector del retail está muy fragmentado ya de por sí, y estas legislaciones son necesarias, pero hay que abordar muchos temas y asegurarse de contar con la participación de todos los actores. Esperamos que el nuevo mandato sea consciente de que ahora es el momento para comenzar a implementar lo que se ha legislado, hemos tenido una agenda muy ambiciosa pero ahora es el momento de empezar a implementar las reglas. Y para ello, que trabajen mano a mano con nosotros para asegurar la practicidad de la legislación y que esta es adecuada respecto a la manera en la que funciona el sector, y tiene en cuenta factores como el coste de la inversión para implementarla, por ejemplo. Países como Francia están muy avanzados en legislación sostenible, lo que crea más estrés para las empresas y un problema de competitividad, así que también hay que trabajar para harmonizar todas estas legislaciones.
P: ¿Está Europa intentando legislar demasiado rápido?
R: Depende del sector. Es cierto que la legislación era necesaria, y sabíamos hace tiempo que estaba al llegar, lo único que no sabíamos era el contenido y los tiempos exactos. Hasta ahora había muy poca legislación, es cierto, pero ahora está pasando todo a la vez y con las complejidades que supone tener una cadena de suministro global y fragmentada fuera de Europa.
P: ¿Existe el riesgo de que tantas legislaciones disminuyan la competitividad europea?
R: Por un lado, la legislación quiere facilitar la transformación circular y crear unos estándares comunes muy necesarios, pero si queremos retener el talento y el liderazgo de Europa, hay que asegurarse también de mantener la competitividad del mercado europeo. Reforzar eso es permitir que se invierta, asegurar el mercado único, luchar en contra de las fragmentaciones que están llevando a que se hagan más y más leyes nacionales. Es muy difícil monitorear las ventas que se dan fuera de Europa, lo que crea una competencia injusta, y una de nuestras principales demandas pasa por unificar esto y que, dentro del mercado europeo, todos jueguen con las mismas reglas. Las transiciones hacia los modelos que plantean las legislaciones son costosas, y se necesitará inversión y elevará los costes, todo mientras los países no europeos no deberán hacer lo mismo.
La industria de la moda tradicionalmente no tiene mucho margen de beneficio, y el coste de la legislación tiene un impacto directo en nuestra performance
P: ¿Cómo será la industria textil en el futuro?
R: Ya está cambiando muy rápidamente. Se está invirtiendo fuerte en sostenibilidad, circularidad y descarbonización. Lo que continuará aumentando esperamos que sea la competitividad, a la vez que se seguirá invirtiendo en la digitalización y la experiencia al consumidor. La industria ya está trabajando también para usar su posición dentro de la cadena de valor como contrapeso para avanzar en circularidad y cada vez vemos más iniciativas para ayudar a los consumidores que se centran en reparar o la segunda mano.
P: ¿Cuáles son las principales demandas de Eurocommerce?
R: Pedimos una estrategia que se centre en la competitividad y en hacer de Europa un buen destino para invertir. Una regulación mejor, sí, pero que se haga junto con nosotros. La industria de la moda tradicionalmente no tiene mucho margen de beneficio, y el coste de la legislación tiene un impacto directo en nuestra performance. Queremos que se acaben de legislar algunos de los paquetes de medidas del Green Deal, pero también que se trabaje en las implementaciones prácticas del pasaporte digital, por ejemplo. También estamos trabajando con las empresas a través de sistemas educativos para que los empleados estén entrenados y tengan los conocimientos necesarios en la era digital y la gestión de los datos.
P: ¿Se ha dejado atrás a las pequeñas y medianas empresas?
R: La transición es difícil, y el coste es especialmente elevado para las pymes, pero también sus inversiones son más reducidas. En 2022, un estudio de Mckinsey reveló que de los 600.000 millones de euros que se invertirán hasta 2030, apenas un 10% vendrá de las pymes, mientras que el 80% recaerá en las grandes empresas. Abogamos por medidas adaptadas, pero también por aumentar el intercambio de buenas prácticas entre países que permita que estas pequeñas y medianas empresas crezcan. En el sector del retail, además, es necesario impulsar los centros de las ciudades, donde más presentes están las pymes, porque aunque vemos que las grandes ciudades son muy atractivas, el centro de las pequeñas y medianas ciudades se está vaciando.