Temu apuesta por el ‘US to US’ y busca comerciantes estadounidenses para producir en el país

Temu empieza a replicar su cadena de valor en Estados Unidos. La plataforma asiática, que ha visto como su modelo de negocio basado en productos a muy bajo precio entra en peligro tras el cierre del vacío legal de minimis, está inmersa en un proceso de ampliar su cadena de suministro a Estados Unidos.

El fin definitivo de la normativa esta semana, que permitía a los paquetes de bajo valor entrar en el país sin pagar impuestos, ha conllevado ya una subida de precios en los artículos de Temu, a través de una recarga automática para los consumidores a la hora de pagar. La también asiática Shein, principal competidor de Temu, ha llevado también a cabo una estrategia similar, con incrementos en el precio de sus productos.

Ahora, la empresa busca mantener su negocio, basado principalmente en precios bajos, con la conformación de una cadena de valor en Estados Unidos. Según ha explicado la compañía, está activamente buscando productores estadounidenses con los que trabajar y eludir los aranceles que supone exportar los artículos desde China.

Temu y Shein han elevado los precios ante el cierre del vacío legal que permitía a sus paquetes entrar en el país sin pagar impuestos

Una estrategia similar también la está siguiendo Shein. El gigante asiático, que cuenta con sede en Singapur, trabaja a través de una red de proveedores chinos. Desde hace algunas semanas, sin embargo, la compañía estaba considerando mover a otros países asiáticos la cadena de valor, y evitar así el efecto de los aranceles a los que están sujetos los productos provenientes de China.

Más allá de la eliminación de la exención fiscal, de hecho, ambas compañías se enfrentan también a los aranceles resultantes de la creciente tensión comercial entre Estados Unidos y China. Mientras el presidente del país, Donald Trump, puso en pausa el aumento de los aranceles a todos los países del mundo hasta verano, los mantuvo para China.

Esto ha ocasionado que todas las importaciones chinas a Estados Unidos estén actualmente sujetas a un arancel superior al 100%. “Esta medida está diseñada para ayudar a los comerciantes locales a llegar a más clientes y expandir sus negocios”, aseguraba Temu en su comunicado.