Nike recurre a otro veterano para liderar su estrategia en la nueva era de Elliott Hill
El grupo estadounidense de deporte coloca a Jennifer Hartley al frente de la estrategia de la empresa, relevando en el puesto a Daniel Heaf, que abandonó la compañía en el marco de la reorganización del nuevo consejero delegado.


Nike apuesta por otro veterano para reconstruir su camino. El grupo estadounidense, liderado desde el año pasado por Elliott Hill (nombrado consejero delegado tras uns trayectoria de más de treinta años en la empresa), nombra a Jennifer Hartley como máxima responsable de estrategia, según Bloomberg.
Con catorce años de carrera en la multinacional de Beaverton (Oregon), Hartley se suma al equipo de primeros ejecutivos de la empresa y será una de las piezas clave del relanzamiento que está pilotando Hill.
Hartley, que comenzará en su nueva posición esta misma semana, inició su trayectoria en Nike en 2020, tras pasar por McKinsey y Arthur Andersen. La ejecutiva releva en el cargo a Daniel Heaf, que abandonó la empresa a principios de año en el marco de la reorganización impulsada por el consejero delegado.
Nike está ejecutando una estrategia para dar la vuelta a sus resultados, debilitados desde hace más de un año
A finales del año pasado, Nike colocó a Elliott Hill, un veterano de la casa, como consejero delegado para corregir el rumbo de la compañía, afectada por una pérdida de posicionamiento y por la competencia creciente de nuevos operadores (marcas como On o Hoka) tras la estrategia introducida por el anterior primer ejecutivo, John Donahoe.
Con la nueva hoja de ruta de Elliott Hill recién presentada, los resultados todavía no se han corregido. El pasado febrero, Nike concluyó el tercer trimestre de su ejercicio reduciendo ventas un 9,33% y resultado neto un 32,25%. Las ventas en el tercer trimestre se situaron en 11.269 millones de dólares, a la baja desde los 12.429 millones de dólares del mismo periodo del ejercicio anterior.
En el tercer trimestre, Nike ha encogido un 15,94% su resultado bruto, hasta 4.675 millones de dólares, mientras el resultado neto de la compañía se desplomó un 32,25% y perdió la cota trimestral de los mil millones, con 794 millones de dólares.