Walkinpitas apuesta por la internacionalización y el online para facturar 6 millones en 2023

Las zapatillas asturianas de Walkinpitas miran más allá. La compañía de calzado pone el foco en potenciar su internacionalización y en crecer online y prevé entrar el próximo año en Suiza, Francia, Alemania y Austria, con el objetivo de aumentar su facturación hasta seis millones de euros, según ha adelantado Paco Rojo, cofundador de la empresa, a Modaes.

Este año, Walkinpitas prevé cerrar el ejercicio con una facturación de cuatro millones de euros, el doble de lo que registró en 2021. Actualmente, la compañía tiene presencia en Portugal, Reino Unido, Grecia, Chipre, México e Italia, su principal mercado.

La empresa ya genera genera el 70% de sus ventas fuera de España. De hecho, Walkinpitas nació como una compañía pensada para operar en el mercado internacional, según relata Rojo.

El origen de la empresa está en finales del siglo diecinueve, cuando el bisabuelo de los actuales directores de la compañía fundó Rojo Cortés, una compañía especializada en la distribución textil y de calzado para marcas de terceros.

Con las décadas, la empresa llegó a fabricar en Asia para grandes grupos de distribución, trabajando con un equipo instalado en el continente. No fue hasta 2015 que los primos Juan y Paco Rojo, cuarta generación, decidieron continuar con la tradición familiar y transformaron aquella sociedad en Walkinpitas, con su propia marca comercial de calzado y con el modelo de zapatilla camping en el centro de su oferta. “Es un diseño que tiene una larga trayectoria en España”, explica Paco Rojo.

Walkinpitas concentra la mayoría de sus ventas en el mercado italiano y genera el 70% de sus ingresos en el extranjero

Con sede en Oviedo, la compañía comenzó operando en el canal online “con el objetivo de vender fuera”, describe el cofundador de Walkinpitas. Entre los planes a futuro de la empresa en su fundación figuraba el trasladar la producción a España, pero se acabó cancelando este proyecto. Walkinpitas produce la gran mayoría de su producto en China. “El proyecto ha evolucionado mucho”, recuerda Rojo.

En 2016, la empresa facturó 70.000 euros, una cifra que ascendió a 300.000 euros el año siguiente. El gran crecimiento se dio en 2020, el año del estallido de la pandemia, cuando Walkinpitas disparó sus ventas a través del canal online y alcanzó una cifra de negocio de un millón de euros. En 2021, la cifra de negocio de la compañía se duplicó hasta dos millones de euros.

En el canal online, Walkinpitas factura el 15% de sus ventas y está tanteando su entrada en Zalando para continuar potenciando su negocio digital. Para ello, la compañía ha puesto en marcha un plan de crecimiento para los próximos cinco años con el objetivo de que su negocio online alcance una facturación de 2,5 millones de euros sólo a través de su propia plataforma.

Actualmente, la empresa se distribuye de la mano de cerca de novecientos clientes a escala internacional y, sólo en España, está disponible en alrededor de trescientos puntos de venta. Además, Walkinpitas trabaja con un centro logístico en Valencia y está tanteando externalizar toda esta área para centrarse en los departamentos de producto, comunicación y finanzas. En su sede en Oviedo, trabajan quince personas.