Empresa

Shana supera los cien millones de euros en su tercer año de existencia

P. Riaño

16 ene 2013 - 05:00

El low cost de Shana  cierra su segundo ejercicio completo superando una cifra simbólica. La compañía de distribución de moda liderada por el empresario Julián Imaz  ha alcanzado una cifra de negocio de cien millones de euros. La empresa ha registrado un crecimiento de más del 30% respecto a los 75 millones de euros de facturación logrados en 2011.


Shana, que cuenta con 130 tiendas en España y sesenta en el extranjero, puso en marcha su primer punto de venta en mayo de 2010 y se ha convertido en uno de los fenómenos de la distribución de moda. Desde su fundación, la empresa basó su estrategia comercial en ofrecer moda para jóvenes a precios bajos, por lo que compite directamente con grupos como Primark.

 

La empresa ha variado, sin embargo, su política de retail. La cadena llevó a cabo inicialmente un rápido crecimiento a través de franquicias, para después dejar atrás esta fórmula y centrarse en la puesta en marcha de tiendas de grandes dimensiones de manera directa.

 

Shana ha concluido 2012 con la apertura de 22 tiendas de alrededor de 700 metros cuadrados en España gracias a la alianza con el grupo mexicano Sim (liderado por Federico Fernández), con el que ha creado una nueva sociedad que vehicula estas aperturas.

 

Los planes de la compañía, con sede en Paseo de Gracia de Barcelona, pasan por poner en marcha entre 25 y 30 establecimientos más de estas características a lo largo de 2013. En paralelo, Shana seguirá creciendo en el mercado nacional de la mano de El Corte Inglés, donde ya cuenta con espacios en una decena de centros.

 

A mediados de 2011, la cadena de moda comenzó a tejer su desarrollo internacional y ha concluido el último ejercicio con un 30% de su facturación procedente de los mercados internacionales.

 

La empresa está presente ya en más de veinte mercados, como Colombia, México, Marruecos, Singapur o China. Las previsiones de Shana pasan por que la exportación represente el 50% de su facturación en 2013, cuando pretende alcanzar un crecimiento del 30%.

 

El aprovisionamiento está siendo una pieza clave del desarrollo de la cadena Shana, cuya principal baza para competir son los precios. La empresa apuesta por controlar su producción y gestiona el grueso de su fabricación en Portugal.