Rosa Clará, también a por EEUU: la empresa se vuelca en el país con tienda en Beverly Hills
La compañía de moda nupcial abrirá en primavera un flagship en Beverly Grove Hills, que se sumará a los de Miami y Chicago. La empresa tiene Estados Unidos como prioridad para 2025, igual que Pronovias, su gran rival en el sector.


24 ene 2025 - 05:00
La moda nupcial española gira también su mirada hacia Estados Unidos. Con los grandes retailers del mundo con el mayor mercado de consumo del mundo en su objetivo, Rosa Clará se suma a la apuesta de Pronovias por este país. La empresa, número dos del sector en España por volumen de negocio, convierte Estados Unidos en su prioridad de 2025 y prepara la apertura en Los Ángeles de su tercer flagship en el país.
Según han confirmado a Modaes fuentes de la empresa, la próxima primavera Rosa Clará pondrá en marcha un establecimiento en Beverly Grove Hills, en Los Angeles (California), a pocos minutos de West Hollywood y de Beverly Hills. Este punto de venta se convertirá en el tercer flagship de Rosa Clará en Estados Unidos, junto al de Miami (abierto en 2013) y el de Chicago (puesto en marcha en 2023).
Los planes de la compañía pasan por reforzar aún más su presencia con tiendas monomarca en el mercado estadounidense, analizando ubicaciones como Dallas, Atlanta o Boston. Estos puntos de venta acompañarán el desarrollo de la marca en el canal multimarca.
Rosa Clará opera en Estados Unidos a través de filial propia
Pronovias, gran rival en España de Rosa Clará, ha marcado también Estados Unidos como su mercado prioritario para 2025, centrando su expansión en el canal multimarca. La empresa, que acaba de concluir la centralización de su estructura en España, confía en este país como una de las vías para recuperar el crecimiento de las ventas, que en 2023 se situaron en 136 millones de euros.
Rosa Clará, que en 2025 cumple treinta años de trayectoria, se encuentra en plena apuesta por el crecimiento internacional, tras haber dejado atrás el golpe del Covid-19, una crisis que afectó especialmente al sector nupcial por la paralización de los eventos sociales. Según los últimos datos disponibles, la empresa cuenta con 140 tiendas monomarca y presencia en 4.000 puntos de venta, que le dan presencia en ochenta países.
Con sede central en L’Hospitalet de Llobregat (Barcelona), Rosa Clará cuenta con filiales en Estados Unidos, Brasil, México, Canadá, Portugal, Francia, Reino Unido y Alemania. La empresa opera además con cuatro centros de actividad en España, donde gestiona la producción y distribución de sus dieciséis colecciones de novia y seis de fiesta al año.
El pasado octubre, la compañía de moda nupcial anunció la compra de un solar de 4.000 metros cuadrados colindante con su centro logístico y de producción de L’Hospitalet, con 5.000 metros cuadrados. En el espacio adquirido, la empresa está construyendo una nueva sede corporativa de 12.000 metros cuadrados, con una inversión de 20 millones de euros.
La compañía compró un solar el año pasado para construir una nueva sede corporativa
Rosa Clará, que no consolida sus cuentas, finalizó el ejercicio 2023 con una cifra de negocio de 71 millones de euros y un resultado bruto de explotación (ebitda) de 15,5 millones de euros. La principal sociedad del grupo es White Factory Holding, que sólo presenta cuentas individuales.
Daniel Clará, hijo de la diseñadora Rosa Clará (fundadora de la compañía), fue nombrado el pasado noviembre administrador único de White Factory Holding a través de la sociedad Fecla, en sustitución de Rosa Clará, que fue revocada. Daniel Clará ocupa el cargo de vicepresidente en la empresa.
La fundadora, que comenzó su trayectoria en el sector trabajando para Pronovias y en 1995 puso en marcha su propia empresa, ha comenzado, así, el proceso de relevo generacional para ceder a su hijo las riendas de la compañía, cuya dirección está en manos actualmente de Manuel Cano, consejero delegado. Además de Cano, otros de los hombres fuertes en la estructura de Rosa Clará son Pedro Del Olmo, director de producto, o José Antonio López Pay, responsable de la línea de fiesta.