Más presión al margen: los gigantes de la paquetería amenazan con subir precios al online
Compañías como Seur se plantean elevar el precio de los envíos para mitigar el impacto en sus cuentas. Los gigantes del sector de la logística emiten profit warnings ante la baja rentabilidad de las operaciones online.
11 mar 2019 - 04:52
“La barra libre ha llegado a su fin”. Así de contundente se mostraba el pasado viernes Alberto Navarro, consejero delegado de Seur, en una entrevista publicada en Expansión. La compañía es sólo uno de los gigantes de la paquetería que ha comenzado a subir precios a sus clientes ante el impacto del comercio electrónico en sus cuentas. La decisión de Seur, junto a otras compañías del sector, no hace más que añadir más presión todavía sobre los márgenes del sector de la moda, uno de los principales usuarios de este tipo de servicios por el auge del comercio electrónico.
A lo largo de los últimos años, la moda se ha visto afectada por una progresiva reducción de sus márgenes. Por ejemplo: desde 2011, Inditex ha encogido, año tras año, su margen bruto: si en 2011 se situaba en el 59,3%, en 2014 descendió hasta el 58,3% y en 2015 se situó en el 57,8%; en 2017, el ratio volvió a debilitarse, situándose en un 56,3%, frente al 57% de un año antes.
Los precios de venta al público han causado, en gran medida, esta evolución, pues los grupos de moda han tratado de capear la caída de las ventas con descuentos y promociones. Por otro lado, Internet podría ser otro causante de esta caída de los márgenes. Los expertos del negocio señalan que el margen unitario de las ventas online suele ser inferior al de las ventas físicas, si bien los gigantes del sector lo niegan y aseguran que el impacto es no dilutivo.
La subida de los precios del transporte podría impactar también en los márgenes de las empresas de moda, especialmente en aquellas de menor tamaño y, por tanto, con menor poder de negociación.
Grupos como Seur o DHL han decidido subir los precios de los envíos ante el impacto en sus márgenes
“Nuestra base de costes lleva unos años en crecimiento, a lo que se suman las subidas del salario mínimo y del diésel, y las restricciones ambientales en las ciudades. Hay una presión muy fuerte sobre los precios, con el ecommerce concentrado en unos pocos operadores, y se ha generado el concepto de que el transporte y las devoluciones de los productos tienen que ser gratis”, señalaba a Expansión el consejero delegado de Seur.
Los gigantes de la paquetería se han beneficiado durante los últimos años del rápido aumento de los envíos gracias al fuerte desarrollo de operadores online como Amazon o Zalando. Sin embargo, el aumento de precios no ha seguido la misma senda que el incremento de los costes de transporte.
Así, grupos como DHL han comenzado a advertir ya sobre la necesidad de reestructurar sus operaciones ante la evolución de su beneficio por debajo de previsiones. El pasado junio, por ejemplo, DHL rebajó casi una cuarta parte sus previsiones de resultado operativo para 2018, provocando una fuerte caída de sus acciones.
Lo mismo le sucedió en bolsa a la estadounidense FedEx, que en diciembre se desplomó tras lanzar un profit waring, en este caso por el impacto en sus cuentas de la desaceleración de la economía global. UPS o Royal Mail son otras de las compañías que ya han admitido el debilitamiento de sus cuentas.
Algunos de estos gigantes han comenzado ya a subir precios. La alemana DHL, por ejemplo, ha elevado sus tarifas en su mercado local para paquetes enviados al consumidor final desde tienda y lo ha hecho también para paquetes de más de cinco kilos.