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Manel Adell se incorpora a Puig un año después de su salida de Desigual

Modaes

18 sep 2013 - 10:05

Nueve meses. Ese es el tiempo que ha tardado Manel Adell en retomar su actividad en la industria de la moda. Tras su salida de Desigual en diciembre de 2012, ahora Manel Adell ha sido nombrado consejero del grupo catalán de perfumería Puig, según consta en el Registro Mercantil.

 

Esta es la segunda incorporación que la compañía realiza a su órgano de administración en menos de un año y el tercer gran fichaje en menos de dos, tras el nombramiento de Jordi Constans, ex consejero delegado de Louis Vuitton, el pasado marzo, y la incorporación de Ralph Toledano como presidente de la división de moda, en enero de 2012.

 

Adell, que fue consejero delegado de Desigual, anunció que abandonaba la compañía en julio de 2012 e hizo efectiva su salida el 1 de enero de 2013. Según la compañía, Adell dejaba su cargo “para emprender nuevos proyectos profesionales y personales”. Además de su incorporación al consejo de Puig, Manel Adell también ha sido nombrado consejero de la multinacional danesa Tiger, especializada en distribución de productos low cost.

 

El ejecutivo, nacido en Barcelona en 1961, lideró Desigual en su etapa de relanzamiento. Adell se incorporó a la compañía como consultor en 2002 y, posteriormente, se sumó al capital de la empresa hasta ser propietario de un 30%, un porcentaje que, tras anunciar su salida, vendió a Thomas Meyer, fundador de la compañía. Antes de formar parte de Desigual, Adell trabajó en Agrolimen y Cadbury Schweppes y fue director de expansión internacional de Bang & Olufsen.

 

Tras el nombramiento del ex consejero delegado de Desigual, el consejo de Puig pasa a estar formado por diez personas: Marc y Manuel Puig, de la familia propietaria y responsables actuales de la compañía, Marcial Campos, Yovanna Kampouri, Pedro Nueno, Yannis Petrides, Rafael Cerezo, Josep Oliu, Jordi Constans y el mismo Manel Adell, según La Vanguardia.

 

Puig concluyó el ejercicio 2012 con un resultado neto de 173 millones de euros, un 12% más que en el ejercicio precedente, y elevó sus ventas un 11%, hasta 1.488 millones de euros. Ese aumento permitió a la compañía acercarse a su objetivo de los 1.500 millones de euros de facturación.