LVMH toma una participación minoritaria de Our Legacy para apoyar su expansión internacional

LVMH invierte en moda urbana. El brazo inversor del conglomerado francés de lujo LVMH Luxury Ventures ha adquirido una participación minoritaria en la marca sueca de moda masculina Our Legacy, fundada en 2005 por Jockum Hallin, Cristopher Nying y Richardos Klarén.

Si bien los términos del acuerdo no han sido revelados, según un comunicado de ambas empresas, esta inversión apoyará la ambición de Our Legacy de “entrar en nuevos mercados, abrir tiendas insignia en ciudades clave y seguir proporcionando a un público global el mejor producto y diseño posible”.

Además, esta es la segunda incursión en la moda masculina por parte del conglomerado francés, que en 2022 entró en el capital de la neoyorquina Aimé Leon Dore.

LVMH entra el capital de Our Legacy a través de su brazo inversor

Our Legacy, que en los últimos años ha multiplicado por cinco su negocio, alcanzando ventas de 40 millones de euros en el último ejercicio, frente a los 30 millones de euros del año anterior, está inmersa en una fase de crecimiento y expansión internacional que pasa por fortalecer su presencia global con nuevas aperturas en ciudades como Nueva York, Los Ángeles, Shanghái, Tokio, Hong Kong o París, donde la empresa prevé abrir su primera tienda insignia.

En palabras del consejero delegado de Our Legacy, Richardos Klarén, “LVMH Luxury Ventures aportará conocimientos, experiencia y, lo más importante, entenderán y apoyarán nuestro camino para convertirnos en una marca de diseño verdaderamente global”.

Por su parte, Julie Bercovy, directora ejecutiva de LVMH Luxury Ventures, ha afirmado “que Our Legacy es el epítome del movimiento cool, con una mezcla única de minimalismo contemporáneo y subversión creativa”, y ha añadido “que está firmemente convencida de su capacidad para empujar los límites de la moda masculina más allá de su comunidad de fans, mientras que sigue siendo fiel a sus raíces e identidad”.

El conglomerado francés de lujo cerró los nueve primeros meses del actual ejercicio con una caída en sus ventas, sobre todo por el débil desempeño de su división de vinos y bebidas espirituosas, así como una caída de la facturación en el mercado japonés durante el tercer trimestre.

En concreto, el grupo francés finalizó el periodo de enero a septiembre con una cifra de negocio de 60.753 millones de euros, lo que representa una caída del 2,33% frente al mismo periodo del ejercicio anterior.