Empresa

La estadounidense American Apparel entra finalmente en los juzgados para decidir su futuro

Modaes

21 ene 2016 - 11:29

La agonía de American Apparel parece llegar a su fin. La compañía se encuentra desde ayer celebrando el juicio que decidirá si el grupo puede abandonar el equivalente estadounidense al concurso de acreedores con un plan de reestructuración bajo el brazo o, por el contrario, deberá dar entrada a nuevos socios inversores, con Dov Charney, fundador y ex consejero delegado del grupo, a la cabeza.

 

Mientras que Dov Charney, de la mano de Hagan Capital, testificará durante el día de hoy y defenderá su intención de hacerse con la compañía por 300 millones de dólares (274,6 millones de euros), Paula Schneider, actual consejera delegada de American Apparel, subió ayer a la palestra para explicar cuál es la situación de la empresa.

 

Según explicó Schneider, cuando ella se unió en enero del pasado año a American Apparel, la situación ya era complicada. “No había línea de primavera, había un stock de cuatro millones de prendas sin comercializar y un pago de bonos a punto de vencer –asegura la directiva-; la compañía ya se encontraba entonces en un proceso de reestructuración”.

 

American Apparel, que entró en concurso de acreedores el pasado octubre, concluyó los nueve primeros meses de su ejercicio con unas pérdidas netas de 64,54 millones de dólares (61 millones de euros), un 57% más que en el mismo periodo del año anterior. Sólo en el tercer trimestre, el grupo estima que sus ventas se han desplomado un 19%.

 

El 28 de septiembre, el grupo dejó de cotizar después de que sus títulos cerraran a 16 centavos de dólar la acción, incumpliendo una de las condiciones de la bolsa de Nueva York, que establece que las empresas cotizadas deben moverse en el parqué en valores superiores a un dólar.