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Kering reduce sus ventas un 17,5% en 2020 lastrada por Gucci

El resultado neto se hundió un 38,6%. En el cuarto trimestre, la empresa redujo sus ventas un 8,2%, por debajo de lo previsto por los analistas.

Modaes

17 feb 2021 - 09:52

Kering reduce sus ventas un 17,5% en 2020 lastrada por Gucci

 

 

Kering cierra un 2020 para olvidar. El conglomerado de lujo, número dos del mundo en su sector, ha terminado el ejercicio de la pandemia con una caída de ventas del 17,5%, lastrada por su marca estrella, Gucci.

 

La empresa logró cerrar el año en beneficios, aunque los desplomó un 38,6%, hasta 1.972 millones de euros. La facturación se situó en 13.100,2 millones de euros, según ha comunicado hoy Kering.

 

“En un año de disrupción, Kering demostró resiliencia y agilidad”, asegura François-Henri Pinault, presidente y consejero delegado de la empresa. “Hemos recuperado la facturación en el segundo semestre, hemos protegido los márgenes y hemos seguido invirtiendo en nuestras firmas y plataformas de crecimiento”, señala.

 

Las ventas en las tiendas propias del grupo se redujeron un 15,9% en términos comparables debido al cierre de tiendas y la caída del turismo, aunque se recuperaron en el segundo semestre gracias al impulso de Asia Pacífico y Norteamérica. Las ventas online se dispararon un 67,5% y coparon ya el 13% del negocio retail, mientras que el canal multimarca se redujo un 17,4% en términos comparables.

 

 

 

 

Sólo en el cuarto trimestre, las ventas de Kering retrocedieron un 8,2%, con una caída del 13,5% en el caso de Gucci, lo que estuvo por debajo de las previsiones de los analistas.

Por marcas, Gucci, la estrella del grupo, fue la que peor evolucionó, con un descenso de las ventas del 21,5% en 2020, hasta 7.440,6 millones de euros. La empresa fue también la que más redujo su beneficio, con un descenso del 33,8%, aunque continúa copando más de la mitad del resultado neto del grupo.

 

En sus tiendas propias, las ventas cayeron un 19,5% en términos comparables, aunque la empresa destaca la buena evolución en China continental, que se benefició de la “repatriación de la demanda”, apunta Kering.

 

El negocio multimarca se hundió un 33,4%, en el marco del plan de la empresa de reducir su red de distribución, y las ventas online se dispararon un 70%.

 

Por su parte, Yves Saint Laurent retrocedió un 13,8%, aunque regresó a la senda del crecimiento en el segundo semestre, aupada por Asia Pacífico, Norteamérica y Japón. Las ventas online de la marca se dispararon un 80%; el wholesale cayó un 13,7% y las tiendas propias, un 13,4%.

 

Sólo Bottega Veneta logró cerrar el año al alza, con una subida del 4,8%, hasta 1.210,3 millones de euros. El resto de firmas del grupo encogieron sus ventas un 9,4%, con “desarrollos satisfactorios” en Balenciaga y Alexander McQueen y fuertes caídas en las firmas de joyería.