Kate Spade se inspira en Ralph Lauren para multiplicar sus ventas hasta 4.000 millones

Kate Spade quiere ser Ralph Lauren. La enseña, propiedad de Fifth & Pacific, busca seguir la estela del grupo estadounidense para convertirse en una marca de lifestyle con un solo objetivo: alcanzar unas ventas de 4.000 millones de dólares (2.881 millones de euros).

“Ralph Lauren es nuestro negocio análogo”, ha señalado Craig Leavitt, consejero delegado de Kate Spade que el pasado mes se convirtió en el máximo responsable del grupo Fifth & Pacific. El grupo estadounidense pasará a llamarse Kate Spade en 2014, tras la venta de Juicy Couture y Lucky Brand.

Actualmente, Kate Spade es una octava parte más pequeña que Ralph Lauren, vende el 75% de sus productos en su mercado local y no cuenta con un fundador que forme parte de la gestión diaria de la empresa. No obstante, la compañía ha elevado un 92% el valor de sus acciones, que cotizan en la Bolsa de Nueva York, según WWD.

Kate Spade se incorporó a la cartera de marcas de Fifth & Pacific en 2006, cuando el grupo, que todavía se llamaba Liz Claiborne, pagó a Neiman Marcus 124 millones de dólares (89,32 millones de euros). Fue entonces cuando la diseñadora Kate Spade y su marido Andy, fundadores de la enseña, la abandonaron.

Desde entonces, Kate Spade ha incrementado su cifra de negocio hasta más de 700 millones de dólares (504,24 millones de euros) y con su buen ritmo ha conseguido que el grupo Fifth & Pacific haya decidido centrar sólo en ella su estrategia de negocio. Por ello, la compañía ha desinvertido de otros activos como Juicy Couture y Lucky Brand y ahora sólo tiene planes para Kate Spade.

El grupo tiene previsto incrementar las ventas internacionales de Kate Spade hasta alcanzar los dos tercios de la cifra de negocio total, frente a menos del 25% que actualmente representa la facturación fuera de Estados Unidos. Además, la compañía también elevará su apuesta por el ecommerce, que ahora copa el 20% de las ventas.

En dos años, Kate Spade quiere alcanzar una cifra de negocio de 2.000 millones de dólares (1.440 millones de euros) y competir directamente con otras enseñas del sector como Michael Kors, Coach, Tory Burch o la misma Ralph Lauren.