Hermès sigue armando su músculo fabril con una nueva fábrica en Normandía

Hermès sigue invirtiendo en el made in France. La compañía francesa, que la semana pasada superó los 200.000 millones de euros de capitalización, abrió el viernes una nueva fábrica en la localidad de Louviers, en Normandía.

Se trata de la primera factoría fuera de la capital francesa que se dedicará a la producción de sillas de montar, aunque su actividad principal será la fabricación de bolsos Kelly. La fábrica tiene una superficie de 6.200 metros cuadrados y empleará a 260 personas.

Durante este año, la compañía continuará reforzando su músculo fabril con dos nuevas fábricas, a las que se sumarán otras dos en los próximos dos años. Las cuatro están actualmente en construcción.

Además, el grupo está también ampliando su fábrica de relojes en Suiza y está renovando otra que se dedica a la producción de vajillas. Hermès fue una de las primeras grandes compañías de lujo en apostar por la integración vertical, comprando proveedores a lo largo de toda la cadena de valor. En total, cuenta con 54 talleres y fábricas.

Hermès también está ampliando su fábrica de relojes en Suiza y renovando otra dedicada a la producción de vajillas

Hermès no ha precisados cuántos bolsos se producirán en esta nueva factoría, aunque en febrero el consejero delegado, Axel Dumas, insistió en desmentir que la empresa limite artificialmente la oferta de sus modelos más populares: “estamos produciendo todos los que podemos”, aseguró ante los analistas.

El grupo fabrica el 78% de sus productos en Francia, y el 65% se producen en sus propias fábricas. El Birkin y el Kelly continúan siendo los bestsellers de la firma y contribuyendo a que la división de artículos de piel y talabartería aporte casi la mitad de la facturación del grupo.

En 2022, Hermès ingresó 4.963 millones de euros con esta área de negocio, mientras que las ventas de ropa y accesorios, la segunda mayor categoría, fueron de 3.152 millones de euros. Por debajo de los mil millones se encuentran divisiones como la perfumería y cosmética, la relojería y los artículso de seda, como el popular carré.

En total, Hermès finalizó el último ejercicio con unas ventas de 11.602 millones de euros, un 29,2% más que el año anterior, y un beneficio de 3.380 millones de euros, frente a los 2.454 millones de 2021.