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El hijo de Renzo Rosso toma también la dirección de Diesel en Estados Unidos

Stefano Rosso, hijo del fundador de Only the Brave (Otb), el grupo que controla marcas como Diesel, Maison Martin Margiela y Marni, lidera la empresa desde 2013 junto a Marina Tosin.

Modaes

6 jun 2017 - 11:53

El hijo de Renzo Rosso toma también la dirección de Diesel en Estados Unidos

 

 

Diesel reordena su cúpula en Estados Unidos. Stefano Rosso, actual co consejero delegado de Only the Brave (OTB) e hijo de su fundador, Renzo Rosso, asume la dirección del negocio de Diesel en Norte América tras la marcha de Tommaso Bruso, quien fichó por Benetton como nuevo responsable de operaciones.

 

Con esta decisión, el grupo redobla su apuesta por el mercado norteamericano. “Diesel es una de las marcas más relevantes dentro del grupo y era necesario que alguien de la familia tomara el control sobre este mercado”, ha explicado Stefano Rosso a WWD. El empresario asume que en los últimos años Diesel ha perdido fuelle en este territorio y que precisa ser relanzada por alguien de la familia.

 

Diesel, que llegó a facturar 300 millones de dólares anuales en Norte América, tiene previsto virar su estrategia en el territorio y operar de la mano de un único socio en cada país. Este nuevo plan entrará en vigor en 2018, pero hasta entonces, la marca mantiene su presencia en grandes almacenes como Macy’s, Bloomingdale’s, Saks Fifth Avenue, Amazon o Hudson Bay, entre otros.

 

El retail continúa siendo el principal canal del grupo en Estados Unidos, por ejemplo, a través del cual genera hasta el 70% de sus ventas. En el país, Diesel cuenta con veinte establecimientos, además de catorce outlets. Los planes de Rosso pasan por hacer de Estados Unidos su principal mercado mundial. En la actualidad, éste lugar lo ocupa Japón.

 

Diesel retoma su apuesta por el mercado norteamericano después de ejecutar una reestructuración en sus oficinas centrales en Breganze (Italia), que afectó al 6% de su plantilla, que asciendo a cerca de 600 empleados. En 2016, la empresa facturó 1.580 millones de euros, dos millones menos que el año anterior. La compañía ganó 3,8 millones de euros, un 8,5% más que en 2015.