El dueño de Andrés Sardá tropieza en el primer semestre y gana un 5,4% menos

La belga Van de Velde tropieza en la primera mitad de año. La compañía de íntimo, propietaria de la marca española Andrés Sardá, ha contraído un 5,4% su resultado neto en los seis primeros meses del año en relación al mismo periodo del año anterior. La empresa cerró el primer semestre con ganancias netas de 20 millones de euros frente a los 21,2 millones de euros de 2016.

Van de Velde registró en este periodo ventas de 116,9 millones de euros, un 1,2% más que en el año anterior. En tipos de cambio constantes, el incremento fue del 1,5%. El negocio de retail tiró en la primera mitad del año de la cifra de negocio del grupo, con un ascenso del 3%. El comercio al por mayor, por su parte, marcó un avance del 1,6%.

En la presentación de sus resultados anuales correspondientes al ejercicio 2016, Van de Velde valoró Andrés Sardá en 5,47 millones de euros. El valor representa poco más de un tercio de la valoración de hace nueve años, de 14,6 millones de euros, y la mitad de lo que pagó por la marca, once millones. 

Por otro lado, Van de Velve participó el pasado enero en una operación para rescatar la firma Noyon, propiedad del grupo PBO, del concurso. Junto al grupo belga, se hicieron con el fabricante francés de encajes PBO, sus empleados, La Perla, Etam y MAS Holding, de Sri Lanka.