El diseñador Antonio Miró retoma el hilo de la moda y regresa a sus orígenes con la marca Groc

El diseñador Antonio Miró regresa a la moda, pero al margen de su propio nombre. El creador, que en 2008 vendió su marca a Christian Nassia y Andrea Arquero (hijos de los fundadores de Twenty), continúa diseñando, pero bajo la histórica enseña Groc, con la que inició su andadura hace más de cuatro décadas. Tras cerrar el emblemático establecimiento en Rambla Cataluña de Barcelona, Miró ha puesto en marcha uno nuevo en la misma ciudad, en el número 385 de la calle Muntaner.

Antonio Miró llegó a ser uno de los diseñadores españoles de mayor reputación en el extranjero, sobre todo a raíz de sus desfiles en la semana de la moda masculina de París. Con ánimo de impulsar el negocio y mantenerse en un segundo plano, el creador catalán decidió abrir su capital. En 2007, el Grupo Cortefiel renunció a la opción de compra que tenía sobre la firma y, un año después, el diseñador vendió el 70% de su empresa a la sociedad Nuevos Valores Textiles, contralada por las familias Nassia y Arquero.

Estas familias eran las propietarias del grupo Twenty, que además de ser el dueño de la licencia de Marithé&François Girbaud para España, también gestionaba las tiendas de Antonio Miró en el país. A finales de 2011, la familia Nassia salió del capital de Antonio Miró, quedándose únicamente al frente Andrea Arquero.

Antonio Miró, que posee un 30% de la sociedad que explota su marca, continúa diseñando bajo la firma Groc, con la que empezó cuando sólo tenía veinte años

Tras aquella operación, el capital de Antonio Miró pasó a estar controlado en un 30% por el propio diseñador y el 70% restante, por Arquero. En 2010, aún bajo el mando de las dos familias, la marca sentó los pilares de su desarrollo: cerró la última de sus tiendas en Barcelona y centró su estrategia en el negocio de las licencias.

La marca Antonio Miró funciona así al margen del diseñador, que continúa involucrado en el negocio de la moda a través de la firma Groc, bajo la que continúa elaborando sus propias creaciones y que sigue dando nombre a su establecimiento, que ha trasladado a la zona alta de la capital catalana. En la nueva tienda de Groc en la calle Muntaner, Antonio Miró comercializa también colecciones de otras enseñas, continuando la tradición de su anterior punto de venta.

La apertura de esta nueva tienda se llevó a cabo en abril de 2015, cuando todavía estaba abierto el emblemático establecimiento homónimo en el número 100 de Rambla Cataluña, que Antonio Miró abrió hace cerca de cincuenta años. Sin embargo, después del pasado verano, la cadena de moda Medwinds, propiedad de Camper, le tomó el relevo en la céntrica vía barcelonesa.

A finales del pasado verano, Miró cerró el emblemático establecimiento Groc en Rambla Cataluña, que ahora ocupa la firma Medwinds, propiedad de Camper

La clausura de Groc en Rambla de Cataluña se sumó además a toda una oleada de cierres de establecimientos históricos en el centro de Barcelona, como Vinçon en Paseo de Gracia, que pasó a manos de Massimo Dutti, o los cines Alexandra, también en Rambla de Cataluña, donde Mango abrió una macrotienda de 1.300 metros cuadrados.

Groc representa los primeros pasos de Antonio Miró en el mundo de la moda. Hijo de sastre, el diseñador abrió la tienda con tan solo veinte años. En las décadas de los ochenta y los noventa, Miró se posicionó como uno de los estandartes de la moda española con el sello de la modernidad barcelonesa. Pionero de la ya desaparecida Pasarela Gaudí, el diseñador fue también uno de los impulsores de la Asociación de Creadores de Moda de España (Acme), además de vestir a celebridades, como John Malkovick o Antonio Canales, entre otros.