Empresa

Custo abarata su moda un 30% para acercarse a los consumidores

10 jul 2009 - 00:00

Si hace un mes la firma italiana Gucci anunciaba su entrada la gama media para capear la crisis y unos días más tarde el dúo Dolce&Gabbana hacían pública una rebaja del 10% en sus prendas, ahora es la firma catalana Custo Barcelona la que da a conocer una reducción del 30% en sus etiquetas. La apuesta por rebajar precio es una de las estrategias que están utilizando las firmas de moda para acercarse a los consumidores, aunque las marcas que operan en el segmento del lujo se resisten, de momento, por miedo a perder su posicionamiento. Custo Barcelona, controlada por los hermanos Custodio y David Dalmau, ha reducido sus precios en tienda un 30% durante los últimos seis meses. Así lo asegura Custo Dalmau en una entrevista a El Mundo. Según el diseñador, esta rebaja es posible gracias a "procesos industriales menos costosos". "Hacer nuestra ropa hoy resulta un 30% más barato que hace dos años", explica. El miércoles por la noche, Custo mostró su próxima colección en la feria barcelonesa de moda urbana The Brandery. La colección podrá verse íntegramente en la edición de septiembre de la pasarela de Nueva York.Según datos facilitados por la propia empresa, Custo Barcelona cerró 2008 con una cifra de negocio de 80 millones de euros. La firma opera a través de varias sociedades, las principales de las cuales son Blue Tower y Ministry of Sound. La marca cuenta con una red de setenta tiendas. Entre los proyectos de crecimiento para los próximos años figura el lanzamiento de una colección de moda infantil. Custo Barcelona, especializado en moda masculina y femenina, ha diversificado su actividad con perfumes, relojes y gafas, aunque estas tres categorías de producto se han atacado mediante licencias. La enseña de los hermanos Dalmau lleva varios años estudiando una posible alianza con un socio o la venta de la compañía, una medida que le hubiese facilitado los fondos necesarios para afianzar su posición internacional. "Es cierto que hace cuatro años sentimos curiosidad de conversar con Louis Vuitton para ver cómo podrían ser las sinergias con un grupo grande", afirma Dalmau. La búsqueda de alianzas está actualmente parada como consecuencia de la crisis económica internacional, que ha reducido el atractivo de las firmas de moda para posibles inversores. A pesar de ello, Custo reconoce que a su empresa le queda mucho camino por recorrer. "Puede que hagamos mucho ruido, pero somos un microbio en el mundo de la moda: el 70% del negocio está en manos de grandísimos conglomerados. Y el 20% o el 30% restantes somos muchísimas empresas, diminutas en comparación", concluye el diseñor.