Blue Banana acelera con retail y prevé superar los ocho millones en 2021

Crecer pese a la crisis. La start up de moda Blue Banana, fundada en 2016, ha cerrado el último ejercicio con un incremento a triple dígito, del 174%, pese a la pandemia. La empresa prevé volver a duplicar ventas este año apoyada en su expansión con retail y en El Corte Inglés.

La compañía, especializada en camisetas y sudaderas, registró una facturación de 4,1 millones de euros el año pasado, frente a los 1,5 millones de euros ingresados el año anterior. Blue Banana ha más que duplicado su facturación desde 2018, y prevé mantener el ritmo de crecimiento este año, hasta rozar ocho millones de euros, según ha confirmado Juan Fernández-Estrada, cofundador de la start up, a Modaes.es.

Pese a que la pandemia afectó al negocio “con retrasos en el proceso de producción y roturas de stock”, Blue Banana pudo capitalizar el auge del canal online durante los meses de confinamiento. La start up, que es nativa digital, avanzó en sus planes de crecimiento el año pasado con la apertura de su primera tienda física en Madrid.

Blue Banana abrió su primera tienda en Madrid en diciembre y planea abrir dos establecimientos más en diferentes ciudades este año

Hasta el pasado diciembre, la start up distribuía sus productos únicamente a través de su plataforma de ecommerce, “pero somos conscientes de la importancia de llevar a cabo una estrategia omnicanal”, subraya Fernández-Estrada. Por eso, Blue Banana abrió las puertas de su primera tienda física en el número 47 la calle Fuencarral de Madrid a finales de año. La acogida, según el emprendedor, ha sido buena, y la empresa prevé cerrar 2021 con una facturación de un millón de euros en este establecimiento.

El objetivo es acabar desembarcando “en las calles premium de las principales ciudades de España”, argumenta. En la actualidad la start up se encuentra en búsqueda de un local en Sevilla, con el objetivo de abrir su segunda tienda en primavera, entre mayo y junio. Los planes también pasan por subir las persianas de un tercer establecimiento en Barcelona, aunque por el momento la empresa todavía no ha fijado fechas para esta operación.

Blue Banana concentra el grueso de su distribución en España, mercado que copa el 98% de las ventas totales. Por el momento, la start up todavía no ha emprendido su expansión internacional, aunque en diciembre abrió su ecommerce al mercado alemán. “La idea es replicar la estrategia que seguimos aquí”, explica Fernández-Estrada.

La ‘start up’ planea desembarcar en El Corte Inglés a lo largo de 2021

La empresa vertebra sus planes de crecimiento en cuatro vectores principales: en primer lugar, acelerar su expansión internacional en Europa, especialmente en Alemania, donde los resultados por el momento “son positivos”; así como en Países Bajos, Italia y Francia.

En segundo lugar, desembarcar con corners en El Corte Inglés a partir de septiembre. “Estamos en conversaciones con ellos desde hace meses, aunque queremos empezar despacio, en no más de dos o tres centras en Madrid y otro en Sevilla”, explica Fernández-Estrada.

Afianzar el canal online también forma parte de los planes de futuro de la start up. “Nuestro core siempre va a ser el ecommerce”, indica el cofundador de Blue Banana. Finalmente, la empresa planea ampliar su línea de producto en los próximos meses con prendas outdoor más técnicas, así como artículos de baño para actividades como el surf.

Por el momento, Blue Banana no tiene pensado dar entrada en su capital a más socios o inversores. “Nuestros planes son ambiciosos, pero sensatos”, argumenta el emprendedor. Pese a esto, Fernández-Estrada matiza que tanto él como su socio, Nacho Rivera, están abiertos a todo tipo de oportunidades en el futuro.

De amigos a socios

Juan Fernández-Estrada y Nacho Rivera fundaron la start up de moda urbana en 2016, mientras estaban todavía en la universidad. Ambos controlan cada uno el 50% del capital de la empresa, que echó a andar con una inversión inicial de 3.000 euros. Blue Banana tiene su sede en Madrid, aunque también cuenta con una oficina en Barcelona.

La start up concentra el 70% de su producción en Portugal, y el 30% restante en Bangladesh. La empresa, que externaliza su logística con un operador en Madrid desde 2019, cuenta con una plantilla de veintitrés trabajadores.