Empresa

Balón de oxígeno para Wolford: se asegura la financiación durante un año mientras busca comprador

La compañía austríaca de calcetería ha acordado con sus acreedores posponer la devolución de sus créditos hasta el próximo junio y ha obtenido diez millones de euros.

Modaes

11 jul 2017 - 17:47

Balón de oxígeno para Wolford: se asegura la financiación durante un año mientras busca comprador

 

 

 

Breve respiro para Wolford. La compañía austríaca de medias de lujo, que perdió a su consejero delegado la semana pasada, ha acordado con sus acreedores posponer la devolución de sus créditos hasta el próximo junio para garantizar así la continuidad de sus operaciones. Durante este periodo, la empresa intensificará el proceso de búsqueda de un nuevo socio mayoritario, iniciado el mes pasado.

 

Además de la moratoria en el pago de sus deudas, Wolford dispone de diez millones de euros en caja para asegurar su liquidez y cubrir las necesidades más acuciantes fruto de sus operaciones. La compañía está pilotada en la actualidad por Axel Dreher, el responsable financiero de la empresa, tras la salida de Ashish Sensarma la semana pasada.

 

Wolford registró entre mayo de 2016 y enero de 2017 unas ventas de 119 millones de euros, un 7,5% menos que en el mismo periodo del año anterior. Las pérdidas de la compañía fueron de 5,7 millones de euros, frente a los números rojos de 0,7 millones de los nueve primeros meses de 2016. La empresa justificó esta evolución por errores de gestión de producto y retrasos en las entregas. 

 

 

 

 

El grupo austríaco espera concluir el año con un beneficio operativo negativo de entre ocho y diez millones de euros. A 31 de enero de 2017, la deuda neta de la empresa se elevó a 17,4 millones de euros.

 

El pasado junio, WMPFamilien-PrivatstiftungSesam Privatstiftung y su subsidiaria M. Erthal&Co., accionistas mayoritarios de Wolford, han iniciado la búsqueda de un nuevo socio que adquiera su participación en la compañía.

 

En 2016, la compañía anunció la centralización de las actividades de finanzas, márketing y recursos humanos en sus oficinas centrales de Bregenz y el servicio al cliente de Europa, Oriente Medio y África en las de Amberes. El cambio afectó a la sede española de Wolford, cuyo equipo comercial para el país pasó a emplear cuatro personas en lugar de seis.