Empresa

Adolfo Domínguez continúa cayendo en 2009, tras cerrar 48 tiendas

2 nov 2009 - 00:00

La cadena de moda Adolfo Domínguez no remonta. La compañía anunció el viernes que ha cerrado el primer semestre de su ejercicio fiscal 2009 (entre marzo y agosto) con unas pérdidas de 2,49 millones de euros, frente al beneficio de 2,6 millones de euros obtenido en el mismo periodo del año pasado. La contracción del consumo ha condicionado la evolución de la empresa, cuyos títulos cerraron la semana pasada en bolsa a 10,9 euros.Según la información remitida a la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV), los ingresos de la compañía gallega ascendieron a 84,3 millones de euros durante los primeros seis meses del ejercicio 2009, lo que representa una caída del 8,8% en comparación con el primer semestre 2008. La reducción de precios para atraer a los consumidores ha golpeado el resultado bruto de explotación (ebitda) del grupo, que se ha reducido un 4%. Adolfo Domínguez ha implementado durante la primera mitad de 2009 un plan para reducir costes, que ha supuesto el cierre de 48 puntos de venta y la apertura de 33. A cierre del primer semestre, la compañía contaba con un total de 508 establecimientos, 95 menos que a finales del pasado febrero. La empresa se ha marcado el objetivo de reforzar su presencia internacional. Actualmente, la red de establecimientos fuera de España representa aproximadamente el 20% del total y la empresa pretende que sumen el 50% en un plazo de cinco años y el 90%, dentro de una década. Además de en España, Adolfo Domínguez opera en Japón, Argentina, Estados Unidos, Puerto Rico, México, Chile y China, entre otros países, con puntos de venta propios y con franquicias. Las previsiones de la cadena de moda para el conjunto del año no son optimistas. De hecho, diversos analistas ya han previsto que el grupo cierre en pérdidas el ejercicio 2009. Según comunicó la empresa a la CNMV, las previsiones pasan por que las ventas mantengan su atonía en el conjunto del año. El lado positivo de la caída de los ingresos es, según la empresa, que este hecho implicará un reducción de los volúmenes de fabricación, por lo que se reducirán al mínimo las inversiones, que podrán destinarse a la apertura de nuevos puntos de venta a través de franquicias y a la promoción de la marca, con iniciativas como el desfile en Cibeles.