Adidas cierra 2021 por debajo de niveles pre-Covid y cifra en 250 millones de euros el impacto de la guerra en Ucrania
Adidas crece, pero no se confía. El grupo alemán de moda y equipamiento deportivo ha cerrado 2021 con un crecimiento interanual del 16%, hasta 21.234 millones de euros. Frente a 2019, antes del estallido de la pandemia, la compañía ha reducido sus ventas un 10,2%.
Para 2022, la compañía prevé incrementar su cifra de negocio entre un 11% y un 13% frente a 2021, hasta alrededor de 23.994 millones de euros. Esto supone un crecimiento de sólo el 1,5% frente a niveles prepandemia. Adidas ha cifrado el impacto de la guerra entre Rusia y Ucrania en sus ventas de 2022 en 250 millones de euros.
“En 2021, hemos crecido a pesar de factores externos negativos que han afectado tanto a la demanda como a la oferta”, señaló Kasper Rosted, consejero delegado del grupo alemán. El ejecutivo ha añadido que “el año ha sido bueno en cuanto a la implementación de nuestra estrategia de crecimiento” y que “en 2022, continuaremos creciendo a pesar de la situación de cada vez más incertidumbre”.
En el ejercicio 2021, Adidas estima un impacto en sus ventas de los cierres de las fábricas en el Sudeste Asiático y la interrupción de la cadena de aprovisionamiento de 1.500 millones de euros.
La compañía también ha explicado que la venta de Reebok a Authentic Brands Group (ABG), que se firmó en agosto de 2021 y se ultimó la semana pasada, supuso unos costes de 220 millones de euros.
Adidas cifra el impacto de los cierres de fábricas en Vietnam y otros problemas en la cadena de suministro en 1.500 millones de euros en 2021
El beneficio de Adidas en 2021 se situó en 2.158 millones de euros, frente a los 443 millones de euros que registró en 2020. Se trata de un crecimiento del 10,8% respecto a 2019, antes del estallido de la pandemia. El margen operativo del grupo de moda deportiva mejoró en 5,3 puntos porcentuales, hasta 9,4%.
Por mercados, la compañía creció en todas las regiones en las que opera. La empresa aumentó sus ventas especialmente en Latinoamérica, donde crecieron un 47%. En Norteamérica, Adidas incrementó su cifra de negocio un 17% y, en Europa, Oriente Próximo y África (Emea), un 24%.
Sólo en el cuarto trimestre, las ventas del grupo alemán se redujeron un 3%. Esta evolución se debe, señala Adidas, a la crisis de la cadena de aprovisionamiento, especialmente a los cierres de fábricas en Vietnam y “las dificultades en el mercado de China continental”.
Las ventas a través de la red comercial propia de la compañía se incrementaron un 14% respecto a niveles de 2019, pero se mantuvieron en cifras similares a las de 2020. A través del canal digital, Adidas redujo su facturación un 2% a causa de la alta base comparable del último trimestre del año de la pandemia. Frente al mismo periodo de 2019, el crecimiento en este canal fue del 39%.
Por mercados, Norteamérica fue la región donde Adidas se vio más impactada a causa de la crisis en la cadena de suministro. La compañía redujo sus ventas un 4% en el mercado en el cuarto trimestre. En Emea, por otro lado, la facturación de la empresa se incrementó un 15%, especialmente impulsada por los canales multimarca y a través de las tiendas propias.
Para 2022, Adidas prevé que su margen bruto se amplíe hasta situarse entre un 51,5% y un 52%. La compañía potenciará este desarrollo en su rendimiento a través de incrementos en sus precios, que “contrarrestarán un crecimiento en los costes de aprovisionamiento”.