Yves Rocher vende la marca de cosmética Flormar

Yves Rocher vende la marca de maquillaje low cost Flormar. El grupo francés, dueño de marcas de cosmética como Petit Bateau o Sabon, ha finalizado las negociaciones con un consorcio de tres inversores turcos, Esas Private Equity, Tacirler Asset Management y Credia Partners, con el objetivo de vender Flormar, marca de maquillaje low cost.

La operación se produce en el marco de transformación de la compañía Rocher que tiene el objetivo de superar la caída de sus ventas. Esta acción “liberará margen de maniobra para invertir en Asia, uno de los territorios estratégicos para el desarrollo del grupo”, señala.

Yves Rocher adquirió una participación mayoritaria en el capital de Flormar en 2012, antes de comprarla al 100% en 2021. Además de sus operaciones en el mercado turco, Flormar cuenta con una red de distribución de más de 1.750 puntos de venta a escala global.

Yves Rocher prevé desarrollar su estrategia de expansión en Asia

Flormar fue fundada en Italia, en 1970 y a la fecha cuenta con alrededor de 800 puntos de venta, distribuidos en más de 100 países. En la década de los ochenta, la empresa de cosmética fue adquirida por la familia Şenbay y empezó su producción en Turquía para luego, en 2012 pasar a ser propiedad del grupo francés Yves Rocher.

En el ejercicio precedente, Yves Rocher nombró dos nuevos directores para sus dos marcas principales, Petit Bateau e Yves Rocher, con efectos a 1 de septiembre del año pasado. Su posición en la firma de moda la ocupa Alexandre Rubin, hasta entonces director de Yves Rocher en Francia y Benelux (Bélgica, Países Bajos y Luxemburgo). Rubin cuenta con una amplia experiencia en el sector del retail, habiendo pasado por grupos como Habitat, Starbucks, Sephora o Camaieu.

Los orígenes de Groupe Rocher se remontan a 1959, cuando su fundador, Yves Rocher, desarrolló su marca homónima de cosmética vegetal. En 1986, el grupo lanzó una segunda firma, Pierre Ricaud, y en 1988 se hizo con Petit Bateau. En los años sucesivos, la compañía continuó expandiendo su cartera con la adquisición de la firma de muebles Stanhome en 1997, el lanzamiento de Kiotis y la compra de varias marcas de cosmética, como la turca Flormar, la italiana Sabon y la estadounidense Arbonne.

El grupo está en manos de la familia fundadora, que en 2012 retomó el control del cien por cien del capital tras adquirir la participación minoritaria que ostentaba la farmacéutica Sanofi. La familia sigue también involucrada en la gestión y Bris Rocher ejerce de presidente. Groupe Rocher opera con una decena de marcas y factura más de 2.000 millones de euros. La empresa emplea a 17.000 personas y cuenta con una red de más de 6.000 tiendas en todo el mundo, además del canal online y los modelos clásicos de venta a distancia (por correspondencia y por teléfono) y la venta directa.