Avon prosigue con su reestructuración y proyecta 600 despidos más

Avon sigue con su plan de ahorro de costes. El grupo estadounidense ha anunciado que reducirá de nuevo su plantilla para poder alcanzar su objetivo de ahorrar 400 millones de dólares (294 millones de euros) en 2016. La compañía de cosmética ha confirmado su intención de suprimir 600 puestos de trabajo que, mayoritariamente, afectarán a su negocio en Estados Unidos.

Avon espera ahorrar alrededor de 50 millones de dólares al año con la reducción de su plantilla en 600 personas. Estos empleados se unirán a los 400 que la compañía ya despidió en abril de 2013 y a otras iniciativas de ahorro de costes, como la salida de mercados no rentables y la venta de algunos de sus activos, como la división de joyería Silpada.

A estos despidos y medidas se suman problemáticas como la que Avon tiene en Francia. El pasado enero, la filial gala de la compañía solicitó la suspensión de pagos voluntaria, perjudicando a 127 empleados del grupo y a miles de vendedores independientes a domicilio.

Con esta reestructuración, Avon quiere volver a la senda del crecimiento y recuperar posiciones en el mapa mundial de la industria cosmética, dominado por gigantes como L’Oréal.

Avon fue fundada en 1886 en Estados Unidos y es uno de los líderes mundiales en venta directa, presente en más de 100 países con más de seis millones de embajadores de la marca, que venden a domicilio y  de modo independiente productos de cosmética y accesorios.