Magnetic Project: lucha judicial por una marca de camisetas

Las camisetas estampadas de Magnetic Project entran en los juzgados. Los socios de la compañía, Ana Fiol y Miquel Àngel Pons, por un lado, y Josep Llambés, por otro, se han enzarzado en una guerra judicial por la propiedad de la compañía. Mientras Fiol y Pons acusan a Llambés de haber cometido un supuesto desfalco, Llambés sostiene que se han apropiado indebidamente de todos los bienes de la compañía.

Los orígenes de Magnetic Project, que comercializa camisetas estampadas mediante una técnica digital con motivos de diferentes artistas, se remontan a 2004. Tras su fundación,  el empresario Josep Llambés se hizo con el control de la empresa para relanzarla.

Desde entonces, la sociedad Magnetic Project 2006 está controlada en un 70% por Llambés y en un 30% por Fiol y Pons (que dividen a partes iguales esta participación). Fiol y Pons iniciaron el proyecto y, posteriormente, Llambés se incorporó como socio inversor, aunque también aporto conocimientos sobre el sector.

Magnetic Project fue la última inversión de Llambés que, a los 65 años de edad, cuenta con una larga trayectoria en el textil. Comenzó su actividad como fabricante de vaqueros y llegó a constituir el grupo Llambés SA, propietario de diversas marcas y con un capital escriturado de 500 millones de pesetas.

Llambés SA fue adquirida en 1980 por el desaparecido banco Bankunión, que pagó 226 millones de pesetas. El empresario fue propietario también de la factoría Industrial de Panas SA, ubicada en Sabadell y que llegó a convertirse en uno de los mayores productores de España de pana, con una plantilla de hasta 800 personas.

Conflicto judicial

Aunque durante los primeros años la unión entre los impulsores de Magnetic Project y el empresario fue positiva, desde el año pasado se encuentran inmersos en una guerra judicial por el control de la compañía.

El pasado septiembre, Llambés presentó una denuncia contra Fiol y Pons por “presunta apropiación de documentación propiedad de la compañía, sino también de elementos patrimoniales tangibles e intangibles al servicio de la sociedad, en orden quizá a su posible utilización en otra empresa ya iniciada o de previsible e inmediato inicio en el sector”.

Tal y como relata la demanda (a la que ha tenido acceso Modaes.es), Llambés asegura que, tras negarse a la petición de dar un mayor porcentaje en la sociedad a Fiol y Pons, estos tomaron de la empresa “dos parabanes o percheros metálicos transportables”, “una máquina de imprimir códigos de barras”, dos ordenadores y su “contenido interno”, “diversos certificados de derechos de la propiedad industrial inscritos a nombre de la compañía” y “originales de cesión de derechos otorgados en su día con diversos artistas”, entre otros materiales.

“A los pocos minutos de llegar (a la oficina) –relata Llambés en la demanda-, aparecieron la señora Fiol y el señor Pons y me confirmaron que se lo habían llevado ellos y que debía atenerme a las consecuencias por no haber accedido a sus pretensiones, entregándome a renglón seguido sus llaves del local”.

Según ha explicado el propio Llambés a Modaes.es, “la demanda fue archivada inicialmente por un defecto de forma, pero se volvió a presentar”. El empresario sostiene que, “al no haber conseguido llegar a ningún acuerdo con mis ex socios”, tiene previsto presentar nuevas demandas por derecho al honor en las próximas semanas.

Segunda versión

Fiol y Pons, por su parte, defienden una versión completamente diferente. Fiol ha explicado a Modaes.es que “en el momento en que descubrimos que este hombre estaba llevándose el dinero de la empresa, decidimos marcharnos de la misma ante su negativa a devolver lo que había robado”.

La fundadora de Magnetic Project asegura que no ha recibido ninguna demanda de Llambés. “Él posee el 70% de la empresa ante notario, ya que la marca la fundé yo en el 2006, tres años antes de siquiera conocerlo, y  nunca nos ha pagado los 40.000 euros  que vale ese porcentaje de la empresa y mis abogados tienen los documentos que lo demuestran, a pesar de que él es el administrador y actúa en nombre de ella”.

Los abogados de Fiol han explicado que “no nos consta ningún procedimiento legal contra Ana”. “Hasta ahora estábamos en fase de negociación con Magnetic Project –sostienen-, pero ahora estamos estudiando tomar acciones legales pertinentes”.

Aunque lo abogados de Fiol prefieren no facilitar el motivo de las demandas que tienen previsto presentar, la fundadora de Magnetic Project Ibiza sostiene que “es muy probable que lo demandemos porque por un lado nos debe 40.000 euros por la compra de sus participaciones y por otro me debe mi sueldo de un año y medio”.