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Los Solari, la saga familiar detrás del gigante Falabella

El retailer chileno se ha consolidado como uno de los mayores grupos de gran distribución del mundo. La compañía, que se inició como una sastrería, opera hoy también con tiendas departamentales. La familia Solari lideró la expansión del grupo fundado por un inmigrante italiano. 

M. Cantini

26 abr 2017 - 00:00

¿Quiénes son los apellidos detrás del negocio de la moda en Latinoamérica? ¿Cuál es la fortuna de las familias más poderosas del sector? ¿En qué otros negocios destacan? ¿Cuántas generaciones hay detrás de cada gigante del retail de la región? Modaes realizará a lo largo de las próximas semanas una serie de reportajes que analizan quién es quién en el negocio de la moda en Latinoamérica.

 

Los Solari, la saga familiar detrás del gigante Falabella

 

Solari es el apellido detrás de la familia chilena con más renombre en el mundo del retail. Cuatro generaciones han liderado el negocio de una empresa fundada por un inmigrante italiano a finales del siglo XIX. La familia, ha mantenido desde entonces el control de la empresa, ha consolidado una de las fortunas más grandes de Chile. Los Solari han sido los artífices de convertir una sastrería en un conglomerado de empresas que tiene presencia en Argentina, Brasil, Colombia y Perú y que espera desembarcar en México en 2018.

 

Falabella también está participada por otra familia de la élite chilena, los Del Río Goudie, que forman parte del accionariado de Falabella desde 2003, cuando el grupo chileno compró Sodimac, la tienda de mejoramiento para el hogar de la familia Del Río. 

 

En 1899, Salvatore Falabella abrió las puertas de una sastrería ubicada en Santiago. Poco a poco el negocio creció con la ayuda de su hijo Arnaldo Falabella, quien potenció la imagen de la compañía familiar en la capital chilena. En 1937, comenzó a trabajar en la empresa la persona que transformaría el apellido italiano en uno de los grupos económicos más del país: Alberto Solari Magnasco.

 

Solari Magnasco, casado con Eliana Falabella, nieta del fundador del grupo, diversificó la producción del negocio de sastrería a la venta de ropa femenina y accesorios para el hogar. La primera tienda oficial de Falabella abrió sus puertas en Santiago en 1958. El matrimonio Solari Falabella tuvo tres hijas: María Luisa, Liliana y Teresa, herederas principales.

 

Los Solari, la saga familiar detrás del gigante Falabella

Liliana Solari

 

El negocio fue creciendo en Chile y, en 1962, la compañía subió la persiana de su primera tienda fuera de la capital en la ciudad de Concepción. A partir de ese momento inició su expansión local, que llevó al grupo a tener puntos de venta en casi todo el país.

 

Antes de su fallecimiento, Alberto Solari designó a su hermano Reinaldo Solari Magnasco como el protector de los intereses de sus hijas María Luisa, Liliana y Teresa, las accionistas mayoritarias del grupo y quienes consolidaron en unas de las fortunas más grandes de Chile.

 

En 1980, Reinaldo Solari Magnasco asumió la dirección del grupo junto con su sobrino, Juan Cúneo Solari. Ambos edificaron otras líneas de negocio del grupo, como CMR, la tarjeta de crédito de Falabella, e impulsaron la expansión internacional en Perú, Argentina, Brasil y Colombia. Tío y sobrino construyeron un hólding de empresas entre las que se encuentran la agencia de viajes del grupo, la aseguradora y Banco Falabella.

 

Los Solari, la saga familiar detrás del gigante Falabella

Juan Cúneo y Reinaldo Solari

 

Aunque los hombres de la familia estuvieron al frente del negocio, las tres hermanas Solari Falabella siempre estuvieron al corriente de las operaciones del grupo y fueron parte de su consejo directivo hasta que fueron relevadas por sus hijos.

 

Liliana Solari amplió su patrimonio ingresando en nuevos negocios en 1987. La empresaria es la fundadora de Bethia, fondo de inversión desde el que controla sus acciones de Falabella y otros negocios de la empresaria como la aerolínea Latam y el Club Hípico chileno, entre otras compañías. Actualmente, su hijo, Carlos Heller, ocupa uno de los puestos del consejo directivo de Falabella, mientras que su hija, Andrea Heller, trabaja a su lado en Bethia.

 

En 2014, se inició otra fase en el relevo generacional del grupo, que hasta ese momento fue comandado por Reinaldo Solari Magnasco y Juan Cúneo Solari. El 6 de abril de ese año, Carlo Solari Donaggio, hijo de Reinaldo, asumió la presidencia del grupo, mientras que Juan Carlos Cortés, hijo de Teresa Solari, fue nombrado vicepresidente del retailer.

 

 

Solari Donaggio está vinculado al grupo familiar desde el inicio de su carrera profesional, donde trabajó en logística, como responsable de producto y planificación comercial, hasta ocupar el cargo máximo de la empresa. Por otro lado, Cortés Solari está vinculado a Falabella desde 2002, cuando entró a trabajar en la dirección general de la cadena de las tiendas departamentales hasta posicionarse como la segunda cabeza del grupo.

 

Los otros dos hijos de Reinaldo Solari, Sandro Piero Solari Donaggio, también están vinculados al grupo. El primero es el actual gerente general de Falabella, mientras que su hermano está a cargo de la búsqueda de nuevas oportunidades de negocio para el hólding familiar.

 

Sergio Cardone Solari, sobrino de Alberto y Reinaldo Solari, también es parte del consejo del grupo. Graduado en ingeniería, el directivo está vinculado al grupo desde 1980 y actualmente ocupa la presidencia de la red de centros comerciales Mall Plaza.

 

Otro miembro reconocido de la familia es Agustín Solari, quien se desempeñó como gerente de Falabella Retail Chile hasta septiembre de 2013 cuando renunció a su cargo para ponerse al frente de otros proyectos en la industria de la moda. Actualmente, es el consejero delegado de Limonada, especializada en moda infantil.