Los pasos solidarios de El Naturalista (y sus clientes)

Pilar ha comprado un par de zapatos de El Naturalista a través de su página web. Cuando abre la caja, además del calzado que usará durante el invierno, encuentra un folleto en el que la marca le anima a escoger un proyecto social en el que participar. La marca española El Naturalista comenzó en 2003 a colaborar con diferentes causas para luchar contra la pobreza, implicando a sus trabajadores y clientes.

La compañía se sirve de su tradición sostenible para ayudar a cientos de niños nacidos en la pobreza. La división de Responsabilidad Social Corporativa de la empresa, que lleva en marcha desde 2003, nació con la intención de realizar programas de cooperación internacional enfocados a atención y educación infantil en países como Haití, Perú, Tanzania y Japón.

“Siempre hemos invertido en proyectos sociales”, explica María Paz Díaz de Rada, responsable del departamento de RSC de El Naturalista. “Tenemos un pie en cada continente donde a través de los zapatos queremos llegar a la gente: nuestro proyecto principal ahora está en Perú, en Arequipa, donde estamos construyendo casas para madres pobres”, comenta la responsable. La compañía lleva a cabo actualmente proyectos en Perú, Japón (donde construye casas para los pescadores) y Haití, desde el terremoto que conmovió al país caribeño en 2010.

Con cada par de zapatos adquiridos, el consumidor destina indirectamente un 2,14% de los beneficios de la compañía a los proyectos de atención y asistencia a la infancia. La empresa forma parte del grupo The Art Company, que distribuye más de un millón de pares de zapatos anuales de sus marcas Art, Neosens y El Naturalista.

Desde el inicio del proyecto de ayuda a la infancia en los países más desfavorecidos, la compañía ha realizado una donación económica de 500.000 euros. “A esto se suma el patrocinio con la donación alrededor de 15.000 pares de zapatos, con un precio medio en tienda de 120 euros”, explica Díaz de Rada. “Los planes para 2016 pasan por continuar con los proyectos que estamos llevando a cabo y ampliar nuestras colaboraciones”, añade la directiva de El Naturalista.

Origen de la producción

El 95% de los proveedores de El Naturalista se ubican dentro de la Unión Europea y el 85% son españoles. “Así se reducen las emisiones derivadas del transporte”, asegura María Paz Díaz de Rada. La enseña, que lleva a cabo diferentes campañas para promover la solidaridad en el tercer mundo, cuenta con socios en las zonas en las que opera para que “nos ayuden a realizar nuestro trabajo y nos faciliten la labor en países donde estamos operando”, comenta la directiva.

La intención del grupo pasa por contribuir a crear una nueva ética empresarial. “Queremos generar un mayor compromiso en la sociedad y promover una mejora a partir de RSC”, explica.