La moda ante su nuevo disruptor: dudas y esperanzas frente a la adoptación de la IA
Directivos de compañías como Tous, The Animals Observatory, Cóndor, Mayoral, Munich, Mascaró, Alma en Pena, The Camp Brands y Misako participan en un encuentro privado impulsado por Modaes de la mano de Centric Software.


Explorar, experimentar, temer, invertir, asegurar, estudiar, formar, transformar… son muchos los verbos que un empresario o directivo del negocio de la moda en España puede poner hoy en una frase que contenga “inteligencia artificial”, una tecnología de efervescente adopción que, por lo general, entusiasma más que asusta a los directivos del negocio de la moda en España. La última edición de Modaes Thinking, un programa de encuentros privados e informales para la reflexión en torno a temáticas clave del sector entre ejecutivos de esta industria, abordó este nuevo gran disruptor de la moda y sus efectos tanto inmediatos como a medio y largo plazo para la industria.
La primera idea fuerza es que, como en los primeros años del desarrollo de Internet entre empresas y profesionales, la IA provoca tanto reflexiones grandilocuentes como ideas prácticas y sencillas, que no por ello son menos relevantes para las empresas de moda. El encuentro, desarrollado bajo el título IA y moda, de las operaciones a la tienda, dejó claro que la opinión es casi unánime con respecto a la importancia de esta tecnología. Dicho de otra forma, no estamos ante otro metaverso.
Pablo Olivares, socio de Metyis, abrió el debate con una introducción en la que aportó algún dato significativo sobre el potencial de desarrollo de la IA generativa: actualmente existen 24.000 aplicaciones basadas en IA y más de 2,3 millones de aplicaciones de apps en la plataforma Ios.
El experto identificó tres factores claves para confiar en el desarrollo de la IA en el negocio de la moda. Por un lado, señaló la “adopción instantánea” de la IA generativa, además de que “afecta a toda la cadena” y “se incrusta en los modelos y los hace más eficientes”. La misma tecnología permite realizar un cambio de paradigma o mejorar la eficiencia de los procesos, resumió.
Carlos Fernández (Hurley): “La IA reduce el riesgo de las decisiones poco informadas”
Carlos Fernández, director general de negocios de Hurley, apuntó que una de las ventajas de esta tecnología es que “reduce el riesgo de las decisiones poco informadas”, mientras que Felipe Cano, socio y director creativo de The Animals Observatory, consideró que la tecnología permitirá que “mucha información acumulada que aflore como conocimiento”.
“El que sepa utilizar la IA para la generación de nuevas ideas y modelos de negocio, triunfará”, apuntó por su parte Tony Batlló, consejero de Mayoral y con una amplia experiencia en varias empresas del sector.
Federico Mayo, delivery director de Centric Software en España y Latinoamérica, señaló que la IA “da resultado tratando casos de uso específicos” y subrayó que, para que funcione, “el caso de uso tiene que estar muy definido”.
Batlló puso sobre la mesa la primera precaución en torno al uso de la IA generativa en ámbitos como el diseño: “si todos usamos la misma herramienta, ¿todos haremos lo mismo?”, plantó. Ante la duda, Felipe Cano, socio y director creativo de The Animals Observatory, consideró que ”la IA nos mejora creativamente, igual que la fotografía permitió que los pintores dejaran de pintar la realidad tal y como es”, ilustró. “Puede potenciar la diferenciación”, opinó.
Federico Mayo (Centric Software) destaca la importancia de definir los casos de uso específicos para que la IA dé mejores resultados
Otro temor en torno a la IA es la ciberseguridad, que puso sobre la mesa Beatriz Fernández, directora general de Mascaró: “me preocupa el tema de la seguridad, cómo protegemos la información”, dijo. Ante ello, Mayo reconoció que “el coste de asegurar la información es enorme”.
Xavier Berneda, propietario y consejero delegado de Munich, apuntó que en los ámbitos de máxima dirección de las empresas “ahora hemos de saber dónde invertir” y describió la adoptación como que “ahora estamos todos en exploración”. “Nos está costando dónde focalizar”, coincidió la directora general de Mascaó.
Xavier Berneda (Munich) destacó que la clave ahora para los dirigentes empresariales es “saber dónde invertir”
En algunos ámbitos, la presión llega desde fuera. Así lo apuntó Jorge Negro, director de estrategia digital de Tous, quien explicó que en el ámbito del ecommerce “hay cambios que vienen del cliente”, ya que hoy “ya es el propio usuario el que utiliza la IA”. “El reto en la adaptación está en encontrar el modelo”, agregó.
La necesidad de una transformación cultural en el seno de las empresas sobrevoló el debate durante todo el almuerzo, en el que los directivos reconocieron que la IA puede eliminar puestos de trabajo que, actualmente, aportan poco valor a la industria.
“La IA hace más tonto al idiota y más listo al curioso”, indicó el directivo de The Animals Observatory, que también lamentó que “hay gente joven con resistencia a este cambio”, una reflexión que secundaron de diferente forma otros participantes en la mesa. Jordi Pereta, director de ecommerce de Misako, sostuvo que por ejemplo que “se van a generar analfabetos de IA”, mientras que otros “parece que quieren hacer todo con IA”.
Para el directivo de Hurley, uno de los grandes factores de éxito de la IA es que, mientras los cambios en el ámbito corporativo “van de arriba abajo”, la adopción de la IA es un proceso de transformación que a menudo “va de abajo a arriba, y esto acelera la adopción”.
Horacio Broggi, director comercial y de expansión de Alma en Pena, continuó con la reflexión en torno al necesario cambio cultural y de capitalización para aprovechar el potencial de la IA en la industria de la moda: “la primera inversión a realizar -sostuvo- es en formar a las personas”.