
José Gómez (Etam), choque de culturas como herramienta de ‘management’
De origen gallego, José Gómez es un cosmopolita al que la vida le ha llevado a ir por el mundo. Nacido en Uruguay, comenzó su carrera en Bosser Fabrics, y ahora, es responsable del negocio internacional de la francesa Etam.


De origen gallego y corazón barcelonés, José Gómez es un cosmopolita al que la vida le ha llevado por el mundo. Nacido en Uruguay, comenzó su carrera en Bosser Fabrics, vivió en Asia durante un tiempo, lideró la filial de Textil Santanderina y desarrolló el negocio internacional de Mango. Su último destino ha sido París, la ciudad en la que, desde hace una década, es responsable del negocio internacional de la francesa Etam.
Cerca del bullicio de los Campos Elíseos, José Gómez escoge el café de un lujoso hotel con vistas a un luminoso patio ajardinado. La meteorología acompaña en uno de los primeros días de sol primaveral. A pesar de los casi 1.000 kilómetros que le separan de su vida familiar en Barcelona, donde regresa cada fin de semana, Gómez lo vive con tranquilidad. “Estamos sólo a una hora de avión”, sonríe, tras el primer sorbo de su café crème.
“Siempre he vivido fuera, soy un español muy raro”, bromea sobre su perfil atípico y viajado, defendiendo que está “muy orgulloso de España y de Barcelona”. Gómez reconoce que nunca le ha costado integrarse en ninguna cultura, aunque Estados Unidos, donde a menudo viaja a ver a su familia en Ohio, es uno de los lugares donde más cómodo se siente. “Aunque sean subjetivos, los valores son universales”, asegura.
De su dilatada trayectoria, subraya la pandemia como “uno de los momentos más complicados, en lo personal y lo profesional”, recordando las reuniones diarias de las seis de la tarde en la war room de Etam para monitorizar la situación de las 1.500 tiendas . “Nos hemos olvidado muy rápido de la pandemia, pero fue muy enriquecedora, hay que aprender de todas las experiencias”, admite, explicando que la compañía salió airosa en un contexto donde “se impuso la ley del más fuerte” gracias a “su gran capacidad de reacción”.
“No hay un día que no sea divertido para el retail”
En general, el retail es exigente y requiere de “un constant flow de productos y servicios en tienda, por lo que el sistema tiene que estar perfectamente engrasado”, asegura Gómez, citando otros retos como la guerra en Ucrania, la inflación, el canal de Suez o los aranceles de Trump. “No hay un día que no sea divertido para el retail”, ríe.
“Trabajar en puestos de alta dirección consiste en gestionar crisis -sonríe-; pero hoy se encadenan con mucha más frecuencia que en los 80”, asegura Gómez, concluyendo con un estoico “life happens”. Para el directivo, “es importante hacer autocrítica, pero siempre es fácil ser capitán después de la guerra”. Su mayor consejo pasa por no quedarse “petrificado ante la inestabilidad y tomar la temperatura diariamente para poder tomar las mejores decisiones”.
Gómez defiende, igualmente, que la virtud está en el término medio y no cree en la cultura de la cancelación. “Hemos vuelto a una sociedad en la que o eres mi amigo o eres mi enemigo, yo creo en el punto medio”, asegura. En Etam, se ha apostado por difíciles decisiones como permanecer en el mercado ruso, “no por ventas, sino por apoyo a nuestros 350 colaboradores” y se trabaja con una visión de long term liderada por un presidente al que admira, Laurent Milchior.
Día a día
Las jornadas de José Gómez son siempre diferentes por sus viajes constantes. El directivo es un habitual del avión, volando a menudo a Estados Unidos, Oriente Próximo o Barcelona, y el jet lag se ha convertido en un compañero de batallas del que sacar provecho. “Me gusta aprovechar la diferencia horaria entre París y otras ciudades para avanzar trabajo y después aprovechar de todo el día por delante”, explica, reconociendo que las horas de sueño no son su fuerte y que le gusta reservar tiempo para los grandes eventos deportivos, especialmente de baloncesto.