Javier Arrévola, director general de la Casa del Libro

Con más de veinte años de experiencia en empresas como Loewe, Suárez o Uno de 50, Javier Arrévola decidió saltar del sector de la moda en 2018 para coger las riendas de la cadena de librerías La Casa del Libro. En paralelo, Arrévola lidera el Instituto Retail, que él mismo fundó.

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El nuevo desorden mundial de la moda

¿Cuáles son los principales retos a los que se enfrenta su sector?

Hay tres retos fundamentales: el primero es la evolución de un negocio tradicional a un negocio digital, incluyendo la omnicanalidad, ecommerce y digitalización del negocio. Otro gran reto es la disrupción de Amazon, con todo lo que ello conlleva, ya que supone el enfrentamiento de recursos ilimitados contra negocios libreros tradicionales con recursos limitados. Por último, la gran competencia que hay hoy día es el sector ocio-entretenimiento.

¿Cuál es la primera norma para un buen manager?

Tener una visión clara del negocio y del entorno y un conocimiento profundo de las personas de tu equipo, sin duda.

¿Y qué debe evitar un directivo?

Debe evitar la tentación de pensar que lo tiene todo bajo control y aprendido. No hay que perder nunca la humildad en ese aspecto.  

¿Qué perfiles no pueden faltar en un equipo directivo?  

Nunca deben faltar las buenas personas, que estén comprometidas y que tengan pasión por lo que hacen. En mi sector en concreto, no deben faltar las personas con vocación librera ni con vocación cultural, eso es muy importante.

¿Qué rasgos son hoy más importantes en un manager?

Saber manejar la ambigüedad y liderar el equipo transmitiendo toda la información y objetivos lo más claro posible.

“Antes se hacían planes estratégicos a tres años y ahora se hacen planes estratégicos mensuales”

En un entorno de tanta incertidumbre, ¿cómo cambia la manera de gestionar una empresa?

Antes se hacían planes estratégicos a tres años y ahora se hacen planes estratégicos mensuales. La lectura del entorno y del corto plazo son fundamentales.                     

Dígame una lección aprendida de la crisis

Cualquier crisis se puede superar si el equipo está unido y la información fluye en todas las direcciones, el contacto entre personas, conversaciones diarias, objetivos claros, reuniones y el feedback constante son esenciales para superar una crisis.

¿Qué envidia del sector de la moda?

 La ilusión y la magia que transmite la creatividad del sector. Eso se traduce en su imagen corporativa, en las tiendas, en cómo se transmite la magia del producto.

¿Qué podría aprender la moda de su sector?

El diseñador está más desconectado del cliente que el autor del lector. En nuestro caso, ambos están muy unidos y podemos acercarles aún más a través de eventos o firmas de libros. Esto falta en el sector de la moda. Hay más vocación en una librería que en un punto de venta de ropa.