
Elliott Hill, el becario de Nike que llegó a CEO
Elliott Hill parecía la mejor opción cuando, en 2019, Nike buscaba a un primer ejecutivo para relevar a Mike Parker, pero finalmente la empresa se decantó por John Donahoe. Sus estilos de dirección no pueden ser más diferentes.


5 feb 2025 - 05:00
Al nuevo presidente de Nike le va el movimiento. Licenciado en kinesiología (la disciplina que estudia el movimiento del cuerpo humano), pasó por catorce posiciones diferentes en Nike, de becario al primer nivel ejecutivo, antes de retirarse. Ahora, Nike ha vuelto a tirar de él para reconducir el rumbo y el alma de la empresa, en uno de los momentos más complejos de su historia.
Super Frog, una extraña rana de color gris y protuberancias en la cabeza antes llamada Addy, es el nombre de la mascota de los TCU Horned Frogs, los equipos deportivos que representan a la Texas Christian Univerisity (TCU). Esta universidad, famosa por sus conjuntos de fútbol americano, es la mayor universidad religiosa de Estados Unidos asociada a la Iglesia Cristiana (Discípulos de Cristo), una iglesia protestante presente en Estados Unidos y Canadá.
Entre sus exalumnos, esta universidad cuenta con uno de los ejecutivos más influyentes de la industria internacional del deporte: Elliott Hill. La vinculación del nuevo presidente y consejero delegado de Nike con la TCU es tal que hasta forma parte de su comité de fideicomisarios, un órgano formado por cincuenta personas que guía, supervisa y acompañan a la institución.
Hill, que ha tomado las riendas de Nike en uno de los momentos más complejos de la historia del gigante del swosh, se licenció en kinesiología (la disciplina médica que estudia el movimiento del cuerpo para prevenir lesiones) en 1986 en la TCU y un año más tarde cursó un máster en gestión del deporte en la Universidad de Ohio.
Hill, que ha tomado las riendas de Nike en uno de los momentos más complejos de la historia del gigante del swosh, se licenció en kinesiología
El ejecutivo nació en 1964 en Austin (Texas), donde se crio en una familia liderada por una madre soltera. Su amor por Nike, que se encargó de dejar muy claro en su primera conferencia con analistas tras tomar el cargo, viene de lejos. En su etapa estudiantil, escribió un profundo análisis sobre Nike y, un mes después, un directivo de la multinacional dio una charla en su escuela.
Hill se presentó, compartió su estudio y pidió un puesto de trabajo: aunque no existía una posición para él, Nike le hizo un hueco y terminó haciendo prácticas de ventas en el showroom de Nike en Memphis, Tennessee, en 1988. Esa fue la puerta de entrada de Hill al mundo laboral, aunque antes había sido asistente de entrenador en los Dallas Cowboys.
Hill, desconocido para el gran público hasta el año pasado pero altamente respetado en Nike, empezó entonces una meteórica y larga carrera en la multinacional deportiva. De becario pasó a ser contratado como responsable de ventas, con promociones año tras año hasta llegar, en 1998, a director de la división de deportes de equipo.
Hill conserva su amor por la Toscana, en Italia, donde viaja regularmente y donde llegó a comprar una vieja granja
De aquella posición pasó a vicepresidente de ventas y retail en Europa, para lo que se instaló en Ámsterdam con su esposa, Gina, y sus dos hijos, Peyton y Austin. De su etapa en Europa, tal y como relata la TCU en un artículo, Hill conserva su amor por la Toscana, en Italia, donde viaja regularmente y donde llegó a comprar una vieja granja.
Hill y su esposa, ambos de origen italiano, disfrutan en la Toscana de uno de sus deportes favoritos, el ciclismo. Tras su paso por Europa, Hill regresó a Estados Unidos, donde se convirtió, en 2003, en vicepresidente y director general de retail en el mercado estadounidense, cargo desde el que siguió ascendiendo, peldaño a peldaño, en el escalafón de Nike hasta llegar a presidente de Consumer & Marketplace (donde lideraba la estrategia comercial y de márketing de Nike y Jordan) del grupo en 2018, puesto en que permaneció hasta 2020, cuando se retiró tras haber ocupado catorce posiciones diferentes en el grupo.
Cuatro años después, cuando las cosas vienen mal dadas, Nike ha vuelto a tirar de uno de las personas que mejor conoce la casa. Su nombre ya figuró en las quinielas cuando el grupo se decantó por John Donahoe, su antecesor y cuya estrategia Hill está dispuesto a deshacer para devolver a Nike al olimpo del deporte.