De Buenos Aires a Santiago: Chile se convierte en la nueva meca comercial de los argentinos

Chile conquista las billeteras argentinas. Santiago se ha convertido en el gran centro comercial de los miles de visitantes argentinos, que cruzan las fronteras en busca de productos de moda y calzado, cuyos precios pueden ser hasta un 60% más baratos.

En 2016, 2,9 millones de turistas provenientes de ciudades como Buenos Aires, Córdoba, Mendoza, La Plata y Rosario, cruzaron la frontera para hacer compras en la capital chilena. La cifra es notablemente alta ya que supone un aumento del 49% con respecto a 2015. La difícil situación del país austral es el principal factor para que los argentinos gasten su dinero fuera de casa, en especial jornadas de ofertas como el Black Friday.

En el pasado, el desarrollo industrial y comercial de Argentina, la catapultaron como uno de los principales destinos de inversión de grandes compañías internacionales como Bulgari, Yves Saint Laurent y Salvatore Ferragamo, quienes tenían sus tiendas en los barrios más importantes de Buenos Aires.

En 2016, 2,9 millones de turistas argentinos visitaron Santiago en busca de ofertas

En 1991, el ministro de economía Domingo Carvallo, implementó la ley de convertibilidad, que buscaba controlar la hiperinflación que sufría el país. El decreto estipuló que un peso argentino valía lo mismo que el dólar. Durante diez años, la economía estuvo estable y protegida.

En 1998, Brasil, Cuba y Venezuela, los principales socios comerciales del país en Latinoamérica, atravesaron por crisis en sus mercados locales, lo que conllevó a una caída en las exportaciones argentinas. El PIB rondaba el 4% y la tensión se veía venir, debido al mal manejo que el presidente de ese entonces, Fernando de la Rua, le dio a la situación.

La inversión extranjera se redujo y en vista del incierto panorama, miles de argentinos sacaron su dinero de los bancos locales para consignarlos en entidades internacionales, lo que desembocó en El Corralito.

Desde entonces los gobiernos posteriores de los Kirchner centraron sus esfuerzos en el sector de las materias primeras, que lograron subir positivamente los puntos de la economía durante un tiempo aunque no fue suficiente para devolver a Argentina a su época dorada. El país no pudo levantar cabeza y compañías como Ralph Lauren, Kenzo, Calvin Klein, Escada y Cartier vieron forzada su salida del mercado argentino.

Ralph Lauren, Kenzo y Calvin Klein cerraron sus tiendas en Buenos Aires, en la década del 2000

Aunque el mercado de la indumentaria cuenta con fuertes compañías locales como Rapsodia, Kosiuko, La Martina y Etiqueta Negra, el consumidor local busca la oferta de grupos internacionales como H&M, Banana Republic y Forever21, que cuentan con una amplia presencia en la capital chilena.

El mercado de lujo también es uno de los más buscados por los compradores australes. En el Distrito de Lujo, controlado por Parque Arauco, los visitantes pueden acceder a los productos de empresas como Dolce&Gabbana, Gucci, Michael Kors, Louis Vuitton, Armani o Carolina Herrera.

En vista de este panorama, los comerciantes chilenos han desarrollado estrategias para incentivar las compras por parte de los viajeros, implementando continuas temporadas de descuentos y facilidades de pago. Por ejemplo, Parque Arauco ha implementado una tarjeta de crédito exclusiva para turistas que permite disfrutar de descuentos en 125 tiendas. La Subsecretaria de Turismo de Chile calcula que los visitantes permanecen un estimado de cinco días en territorio chileno y gastan un total de 300 dólares aproximadamente en compras.

Los precios de la moda en Argentina pueden ser un 40% a un 60% más caros que en Chile

Aunque compañías internacionales como Adidas, Reebok, Superga y Kiehl´s han fortalecido su presencia en Argentina con aperturas de nuevos puntos de ventas en 2016, los consumidores argentinos siguen apostando por comprar en Chile, debido a que los precios en el país aumentan un 40% a 60% debido a impuestos y restricciones arancelarias.

Desde Argentina se promocionan contantemente distintos tour de compras y paquetes vacacionales para disfrutar de la oferta comercial chilena. Para 2017, la Subsecretaria de Turismo de Chile proyecta que el tráfico de turistas de nacionalidad argentina supere los 3,7 millones de personas, transformando a Santiago en una “nueva Miami”.