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Ángel Asensio (Moda España): “La recuperación tardará un año y medio como mínimo”

El presidente de la Confederación Moda España defiende que es momento de apostar por la relocalización y acelerar transformaciones a largo plazo como la sostenibilidad o la digitalización.

I. P. G.

24 sep 2020 - 04:49

Ángel Asensio (Moda España): “La recuperación tardará un año y medio como mínimo”

 

 

Los meses que vienen por delante serán todavía muy duros para la industria, pero hay que “poner las largas”. Así lo defiende Ángel Asensio, presidente de la Confederación Moda España, que opina que es momento para acelerar transformaciones que estaban ya en marcha, como la apuesta por la sostenibilidad o la digitalización para ganar eficiencia. A corto plazo, la prioridad es “resistir”: “como muy pronto, hasta el segundo semestre de 2021 no vamos a ver la recuperación”, sostiene.

 

Pregunta: ¿Cómo afronta la industria de la moda el comienzo del curso?

Respuesta: Con mucha dificultad, con incertidumbre. Porque en la campaña de primavera-verano se han perdido la mitad de meses de venta, y eso ha supuesto mucho más stock en los comercios. Se ha recurrido a muchas promociones para sacar unidades de las tiendas, y eso supone ganar poco dinero y aun así tener sobrante. La campaña de otoño-invierno llega con la amenaza del virus, así que las compras se resienten, y de cara a primavera-verano 2021 hay menos capacidad de compra porque hay menos presupuesto, todavía hay sobrante y hay mercancía que se va a entregar ahora pero se vendió hace un año.

 

P.: ¿Cuánto tardará el sector en recuperarse?

R.: La perspectiva del sector, tanto en comercio como en la industria, es que como muy pronto hasta el segundo semestre de 2021 no vamos a ver la recuperación. Venimos de una crisis que se remonta a 2005, cuando empezó a reducirse la industria nacional en beneficio de los países de mano de obra barata. Luego llegó la crisis de 2008 y ahora nos viene esta situación, que es como una guerra sin tiros pero que arrasa con todo, es desoladora. La recuperación tardará un año y medio como mínimo.

 

P.: El Gobierno recurrió al sector cuando había escasez de mascarillas. ¿Continúan esos contratos en marcha?

R.: Trabajamos muy de la mano con la ministra de Industria, que tenemos la suerte de que está muy comprometida con la empresa y con el sector. En ese momento, se recurrió a la producción de proximidad porque, por un lado, permitía cubrir las necesidades de suministro y, por otro, garantizaban la seguridad. Ahora, lo que estamos reclamando es que en los concursos públicos que se están adjudicando sean para empresas españolas. No sólo porque el dinero con el que contribuyen los españoles se debe quedar aquí, sino porque con él se puede contribuir a la creación de riqueza y empleo. Si lo hacemos fuera ocurre justo lo contrario.

 

P.: Pero España no puede competir en precio y en volumen…

R.: A veces la solución no es lo más barato. Estamos en un momento de apuesta por la sostenibilidad, y eso muchas veces pasa por cambiar cantidad por calidad. Primero, porque se consumen menos recursos y después, porque al tener más durabilidad se generan menos residuos.

 

 

 

 

P.: ¿Cómo valora la gestión del Gobierno?

R.: Ahora tenemos un problema, el virus, y tenemos que enfocar todos los esfuerzos a gestionarlo. Para mí, deberían centrarse en controlar la cadena de contagios. Hay que intentar convivir con el virus, pero manteniendo la actividad. Porque el sistema sanitario que tenemos es una consecuencia de la actividad económica. Debemos tener un plan de contingencia y proteger a los vulnerables y los mayores, pero no transmitir pánico. Se ha generado un agujero que sólo se soluciona con deuda, y esa deuda hay que pagarla, así que tenemos que hacer que la economía se recupere lo antes posible. La actividad económica es básica, sino tendremos hambre y virus.

 

P.: Se ha anunciado un plan de impulso al turismo, ¿hace falta también uno para la industria?

R.: Sí, estamos trabajando con la ministra de Industria precisamente en esa línea. No sólo con medidas operativas como prorrogar los ICOs a siete años con dos años de carencia, sino impulsando la digitalización, la sostenibilidad y la eficiencia, que es la única manera de frenar la caída de los márgenes o incluso recuperarlos un poco. Otra vía es la internacionalización. Es cierto que ahora no es el momento, pero hay que poner las largas y pensar a medio plazo.

 

P.: ¿Habrá una destrucción de empresas como en 2008?

R.: Hay una amenaza fuerte de que ocurra, en todos los sectores. Esto es una cuestión de resistencia: depende de qué colchón tengas podrás aguantar o no. Tenemos que buscar las formulas necesarias para que la empresa no cierre. Tiene que tener flexibilidad, igual tiene que hacer descarga de estructura, pero lo peor es que cierre. 

 

 

 

 

P.: La pandemia puso de manifiesto la dependencia del sector de China. ¿Habrá un repunte de la producción en proximidad?

R.: Hay que intentarlo y trabajar en ello: las cosas no caen por sí solas. Y hay que aprovechar este momento para relocalizar, reindustrializar y garantizar estratégicamente el suministro tanto de equipos de protección individual (EPIs) y mascarillas como de moda en general.

 

P.: ¿El precio cobrará más importancia? ¿Puede competir la industria española?

R.: Anteponer el precio al resto de factores es ir contra la sostenibilidad. Cuando un producto es barato lo compensas con volumen, y eso es contrario a la sostenibilidad. España debe apostar por calidad, y eso significa que detrás hay unos profesionales cualificados con un salario digno acorde al país a donde viven. En paralelo, tiene que haber también flexibilidad. Hay que apostar por marca, imagen, diseño y calidad. Si tenemos una relación calidad-precio mejor que nuestros competidores europeos, mejor, pero nuestro argumento no puede ser precio.