Back Stage

Alicia Gimeno (BabyKid Spain+Fimi): “Una feria es buen termómetro para ver cuánto falta para la recuperación”

La directora de la feria de moda infantil y puericultura en España asegura que el sector vive una situación atípica, pero tiene ganas de volver a reencontrarse. Gimeno afirma que, pese a la crisis, “aún hay mucho tejido empresarial y talento en España”.

C. Juárez

17 feb 2022 - 04:50

Alicia Gimeno (BabyKid Spain+Fimi): “Una feria es buen termómetro para ver cuándo falta para la recuperación”

 

 

 

Vuelta a la presencialidad. BabyKid Spain+Fimi inaugura hoy su primera edición tras el estallido de la pandemia y la segunda con la moda infantil y la puericultura en el mismo espacio. Alicia Gimeno, directora del evento, asegura “que el sector tiene ganas de reencontrarse” tras dos años sin encuentros. Gimeno afirma que el sector tiene que reorganizarse para hacer frente a la nueva normalidad, y que precisamente “una feria es un buen termómetro para ver cuánto falta para la recuperación. En el pistoletazo de salida del evento, BabyKid Spain+Fimi cuenta con 261 marcas registradas y 3.100 visitantes.

 

 

Pregunta: ¿Cuándo volverá el sector a la normalidad?

 

Respuesta: Vivimos una situación atípica, y los calendarios han dejado de ser lo que eran. Reordenar las áreas que conforman el sector costará un poco. Pero la pandemia también ha traído cosas buenas, como más exportaciones del sector, que han crecido un 3% en el último año. También ha favorecido que el online ha vivido un absoluto protagonismo durante los meses de la pandemia, y algunas empresas han sabido aprovecharlo. Sin embargo, todo tiene que volver a reorganizarse: hasta ahora, las compañías han estado preguntándose qué pueden hacer para aguantar y no cerrar. Otra lección que he extraído de la pandemia es la solidaridad del sector.

 

 

P.: ¿El sector ha afrontado mejor esta crisis que la anterior?

 

R.: La ha afrontado con sorpresa. Al final es una situación que nadie se esperaba y mucho menos se imaginaba cuánto iba a durar. La crisis del coronavirus ha provocado que el ingenio se desarrolle de manera rápida y contundente para salir adelante. Además, otra connotación diferente de esta crisis ha sido que el sector venía recuperándose, y, de repente, con el estallido de la pandemia el castillo de arena desaparece. Por eso, las empresas, en su afán de mantenerse a flote, han generado estrategias que en una situación normal nunca habrían puesto en marcha. Ha tenido que venir una pandemia para que tanto el consumidor como las empresas y los fabricantes se pongan las pilas. Ahora hay una oportunidad de evolucionar y hacerlo mejor.

 

 

 

 

P.: ¿Cuál es el primer paso para esa reorganización?

 

R.: El primer paso para reorganizar es asistir a ferias y volver a reunirse con clientes, hay grandes expectativas tanto para los retailers y los grandes grupos. Y si hay expectativa es porque existe una demanda real y necesidad de encuentro del sector. Una feria es muy buen termómetro para ver cuándo falta para la recuperación.

 

 

P.: Bonnet à Pompon, Pili Carrera, Normandie, Trasluz… ¿Cómo cree que quedará el mapa de la moda infantil tras la pandemia?

 

R.: El nuevo mapa del sector pasa por la reorganización. Hay que volver a situarse. Es verdad que el sector de moda infantil y puericultura ha sufrido y ha sido difícil, pero también han surgido pequeñas empresas en mitad de la pandemia, aunque hay que ver su evolución. No sabemos cómo quedará el mapa, pero sí queda mucho tejido empresarial y talento en España para cubrir la demanda.

 

 

P.: En 2020 nacieron un 5,3% de niños menos, y un 18,5% menos que hace veinte años, ¿qué tiene que hacer el sector ante un pastel cada vez más pequeño?

 

R.: Aquí la solución pasa por dos puntos. El primero de ellos es la internacionalización. Las empresas del sector deben de buscar nuevos mercados con mayor tasa de natalidad para crecer. Por otro lado, el sector también tiene que alzar la voz para exigir políticas de apoyo a la natalidad y a las familias. Es urgente.

 

 

 

 

P.: Es la primera edición en formato presencial, ¿ha qué retos ha tenido que hacer frente la organización?

 

R.: Empezamos a organizar la feria y vino ómicron, y lo que se suponía que era sólo una ola se convirtió en un tsunami. Tuvimos que tomar la decisión entonces de retrasar el evento tres semanas porque según las fuentes consultadas, la caída de contagios iba a ser ahora en febrero. Luego, parecía que no era posible llenar todo el espacio, pero al final parece que ha salido bien.

 

 

P.: ¿Por qué se optó por retrasar la feria? ¿Cómo encaja el cambio de fechas en el calendario internacional?

 

R.: Entendimos que si manteníamos las fechas originales era complicado garantizar la seguridad sanitaria en la feria. Además, estamos trabajando en potenciar el carácter internacional del evento, y, sin esa seguridad, no habrían venido visitantes extranjeros. Finalmente, este año esperamos que acudan doscientos compradores internacionales de cuarenta países. Al final, el objetivo de la feria es sumar y generar sector, y sin seguridad sanitaria no podíamos hacerlo.

 

 

P.: Este año hay menos expositores que en otras ediciones, ¿por qué?

 

R.: Funcionamos más con marcas que con expositores y algunos distribuidores aglutinan en su stand a hasta diez marcas. Además, otros expositores no han podido acudir porque nuestro protocolo Covid es muy férreo, y algunos no están vacunados.

 

 

 

 

P.: ¿Qué aporta este formato frente a la celebración de Fimi en solitario?

 

R.: Aporta mezcla. La unión de las ferias de puericultura y moda infantil ha sido consecuencia de escuchar al sector. Las tiendas multimarca, que son nuestros compradores, mezclan cada vez más los productos en sus establecimientos, y para ellos es más cómodo acudir a una sola feria y verlo todo en la misma cita. Al final se trata de sumar, unir, y pensar en el que compra.

 

 

P.: ¿Y celebrar la feria en Valencia en lugar de en Madrid?

 

R.: Organizamos el evento junto a Asepri, y vimos que las instalaciones de Valencia y los servicios que ofrecía tenían unos precios mucho más competitivos. No nos ha importado nunca movernos, de hecho, pienso que las ferias tienen que ser nómadas, y por ahora la celebramos en Valencia.

 

 

P.: ¿Se puede competir con otras ferias como Pitti Bimbo o Play Time?

 

R.: Por supuesto. Nosotros hemos optado por la diferenciación, aquí acogemos a todas las empresas que tengan que ver con el universo de la infancia, desde moda premamá, ropa de bebés, infantil, adolescente o puericultura ligera. Aunque es cierto que nos deberíamos fijar más en el calendario de citas internacionales para la oferta de moda.

 

 

P.: ¿Cómo será el encaje con el online?

 

R.: Ambos formatos aportan y se complementan, uno sin el otro se queda cojo. El formato híbrido está en proceso de engranaje y tiene que funcionar de manera más natural porque viene para quedarse. Está muy bien un formato online, pero sin tocar el tejido no tiene sentido. Al final ha surgido un nuevo matrimonio que parecía que no podría llegar a ningún entendimiento, pero ya no pueden vivir el uno sin el otro.