Aécio Dantas (Silbon): “La segunda mano permite trabajar con el producto en tiempo real”
Dos años después de sacar adelante su línea de negocio de segunda mano, Silbon mantiene los procesos de gestión y venta de manera interna, lo que le ha permitido rentabilizar el negocio apenas dos años después de su comienzo.


“La transformación circular pasa también por asumir nuestras responsabilidades como empresas”, defendió ayer Aécio Dantas, responsable de sostenibilidad de la empresa de moda masculina Silbon. El directivo, que participó en un nuevo webinar de Move! Live, las sesiones informativas de treinta minutos sobre las claves de la sostenibilidad para las empresas de Move! Moda en movimiento, ha liderado la implementación de un sistema de venta de segunda mano dentro de la compañía, uno de los pocos que se llevan a cabo inhouse dentro del sector de la moda en España.
El modelo cumplirá este junio dos años, y la integración y puesta en funcionamiento ha sido tal que, en apenas algo más de un año, ya había alcanzado el punto de equilibrio. “Al principio la idea surgió como una prueba piloto, que queríamos comprobar si podía convertirse en una línea de negocio definitiva o para implementarse sólo en momentos concretos como las rebajas”, explicó.
En base precisamente a esa idea de responsabilidad, Silbon ha puesto en funcionamiento su modelo de recogida y venta de segunda mano completamente de manera interna. La compañía ha situado en varias tiendas puntos para depositar las prendas usadas de Silbon, a cambio de las cuales los consumidores reciben un crédito para gastar en nuevos productos, ya sean de segunda mano o de nuevas colecciones.
Aunque inicialmente la oferta se exhibió en algunas tiendas seleccionadas, desde febrero del año pasado la compañía trasladó la venta al canal online, que se actualiza periódicamente una vez al mes. “Llevar la segunda mano a nuestra plataforma nos ha permitido tener más indicadores del tipo de perfil que compra, y ver que, además, el bonus se utiliza inmediatamente para comprar prendas nuevas, lo que enseguida dotó de sostenibilidad financiera al proyecto”, relató Dantas.
Para mantener el modelo también sostenible en términos medioambientales, además, los pedidos de artículos de segunda mano llegan únicamente a las tiendas, y se hacen coincidir con el envío de mercancía habitual a los establecimientos.
Pese a los buenos resultados que ha supuesto para Silbon su entrada en la segunda mano, el directivo alertó también de una serie de imprescindibles antes de lanzarse a crear un modelo similar. “Lo principal es que las compañías lleven a cabo una evaluación interna muy real, siendo conscientes de si sus productos tienen la calidad o percepción suficiente para seguir presentes en el ciclo de vida”, relató Dantas.
En segundo lugar, añadió, es importante estudiar la intención de la empresa de apostar e invertir realmente por el proyecto, junto a la estructura logística que permitirá establecer el sistema y ajustar los costes.
Desde abril, la compañía de moda masculina ha puesto en marcha un segundo proyecto circular, que pasa por la recogida de ropa también con pequeñas taras o en peor estado (las prendas que se revenden en la página web deben conservarse en buen estado, ya que, de lo contrario, no son recogidas en la tienda). Desde entonces, relató Dantas, la empresa ha recolectado alrededor de 25.000 prendas, de las que un 59% se han vendido en establecimientos outlet, a un menor precio. Del resto, un 8% ha ido a entidades sociales y otro 33%, imposible de revenderse, se ha desviado para su reciclaje.
“La segunda mano permite trabajar con el producto a tiempo real”, añadió finalmente el directivo. Dantas relató como cuando reciben varias prendas de seguida con el mismo fallo o tara, eso les permite identificar un error sistemático y contactar con el proveedor para buscar una solución. “Nuestro objetivo para los próximos años pasa por emprender una hoja de ruta vinculada a la calidad del diseño y la producción, tratando de cuidar mucho más el producto”, añadió.