Entorno

Bangladesh, en el punto de mira de Europa: en jaque sus beneficios arancelarios

El Parlamento Europeo tiene previsto para la semana que viene exponer varios documentos sobre condiciones laborales y derechos humanos, abriendo de nuevo el debate sobre la inclusión del país en el sistema de Everything But Arms.

Silvia Riera

19 feb 2018 - 04:58

Bangladesh, en el punto de mira de Europa: en jaque sus beneficios arancelarios

 

 

Bangladesh, cuestionada por la Unión Europea. Las condiciones laborales en el país y su política en derechos humanos se valorarán el próximo martes en el Parlamento Europeo. Los beneficios arancelarios que la comunidad europea otorga al país asiático a través del programa Everything But Arms (EBA) para el desarrollo de economías emergentes dependen precisamente de sus mejoras en estos ámbitos. De salir de este programa, Bangladesh, el segundo productor mundial de prendas de vestir, pondría en jaque gran parte de su industria de la moda y, en general, de su economía.

 

En la sesión de la tarde del martes 20 de febrero, el Parlamento contempla debatir sobre la implantación del Sustainability Compact en Bangladesh, un programa europeo que se puso en marcha en 2013, a raíz de la tragedia del Rana Plaza, y que monitoriza la evolución de la industria del textil y la confección en derechos humanos, condiciones laborales y seguridad en el trabajo.

 

Dentro de este debate, se pondrán sobre la mesa cuatro documentos: la renovación del Accord on fire and building safety in Bangladesh hasta 2021; el estado del Sustainability Compact; las conclusiones de un encuentro sobre el seguimiento de este mismo programa, y las recomendaciones de un grupo de expertos sobre la aplicación de las indicaciones en derechos laborales de la Organización Internacional del Trabajo (ILO, en sus siglas en inglés).

 

 

 

 

 

 

 

 

El debate en el Parlamento Europeo se produce una semana después de que el Comité de Comercio Internacional del Ejecutivo comunitario visitase Bangladesh y Myanmar. La visita se compuso de dos partes. Por un lado, la comitiva visitó los campos de refugiados de la etnia de los rohingya en Bangladesh y, por otro lado, se reunió en Dacca, la capital del país con altos cargos del Gobierno bengalí para abordar la evolución del Sustainability Compact.

 

En el informe que ha realizado el propio comité tras el viaje se afirma que el país ha reducido la pobreza y ha mejorado el desarrollo económico, pero considera que hay cuestiones pendientes en condiciones laborales, como la libertad de asociación y la negociación colectiva.

 

El grupo europeo de expertos también lamenta el deterioro de los derechos humanos en los últimos años, en la libertad de asamblea y expresión, desapariciones forzadas, asesinatos extra judiciales y violencia contra las mujeres. El comité también alerta de la vigencia del matrimonio infantil, la violencia contra escritores y blogueros, contra minorías religiosas y contra el colectivo Lgbti.

 

 

 

 

Por último, el comité recuerda que la Unión Europea ha destinado 690 millones de euros a Bangladesh en el marco del Multiannual Indicative Programne 2014-2020 y muestra su voluntad de permanecer unidos para avanzar en derechos humanos, buen gobierno y medio ambiente.

 

Las recomendaciones de este comité son clave para que Bangladesh permanezca en el programa EBA (de exportación de todas las categorías de producto menos armas), donde se beneficia del estatus GSP+, que libera de cargas arancelarias a sus exportaciones a Europa. Sobre este pilar se sostiene gran parte de la industria textil del país y, de perderlo, sus exportaciones se encarecerían y perdería competitividad respecto a otros hubs productivos del Sudeste Asiático, como Camboya, Vietnam, Tailandia, Sri Lanka o Laos.

 

No obstante, hay un gran trecho entre el debate en el Parlamento Europeo y una decisión en firme del Consejo Europeo, según expertos consultados por Modaes.es. Para que Bangladesh llegara a perder este estatus, la Cámara Baja debería aprobar una resolución que instara a la Comisión Europea a monotorizar la situación en derechos humanos y condiciones laborales en el país. De este estudio, la Cámara Alta debería valorar una retirada temporal de Bangladesh del sistema EBA, que más tarde, debería aprobar el Consejo Europeo.

 

 

 

Revisable en Myanmar y Camboya

Estos mismos expertos subrayan que Bangladesh es de los países del Sudeste Asiático que se benefician de este estatus que más bien lo tiene para permanecer en él. Desde la tragedia del Rana Plaza, de la que en abril se cumplirán cinco años, el Ejecutivo del país ha avanzado en muchos aspectos. En cambio, en los últimos meses, el Gobierno europeo ha criticado con firmeza a Myanmar y a Camboya. Al primero por la crisis de los rohingya y, al segundo por la crisis política del país.

 

La Unión Europea tendió la mano a Myanmar en 2012 cuando anunció elecciones democráticas. Un año después, se le incluyó en el programa EBA, beneficiándose de un arancel cero para sus ventas a la Unión Europea. A raíz de la expulsión de los rohingya del país, que Naciones Unidas ha calificado de genocidio, la relación entre ambas partes se ha enfriado desde el pasado octubre cuando Europa amenazó con sanciones.

 

En el caso de Camboya, el pasado diciembre, el Parlamento Europeo aprobó una revisión de la cláusula sobre derechos humanos del acuerdo EBA, pidiendo la suspensión temporal de este pacto. La Cámara Baja denunció que el actual Gobierno del país prohibiera al partido de la oposición.

 

También esta semana se evaluará en el Parlamento Europeo el impacto del estatus GSP+ de otros tres polos productivos de la industria de la moda, como Pakistán, Sri Lanka y Filipinas, además de Mongolia y Paraguay. En este caso, el Comité de Comercio Internacional expondrá las mejoras económicas y sociales en el país en los últimos años, así como las cuestiones aún pendientes.