Nacho Ruiz de Terry (Scalpers): “En el momento en que te sientas sobre el ego, te mueres”

Nacho Ruiz de Terry, director creativo de la línea de moda masculina de Scalpers, ha estado vinculado al diseño desde siempre. Formado en Ciencias Empresariales por la Universidad de Sevilla, el directivo inició su trayectoria en el departamento creativo de una agencia de publicidad, donde tuvo su primer contacto con el diseño, donde trabajaba para marcas como Porshe o Sevilla Fútbol Club. “Ahí aprendí a manejar todos los programas”, asegura.

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Poco después, se aventuró a entrar en el sector de la moda, un ámbito que había “respirado toda la vida porque mi madre y mi abuela tenían una tienda”, y puso en marcha su primera marca propia, Scotta, especializada en moda masculina. El directivo puso en marcha la empresa en pleno boom del sector por este tipo de marcas. Poco después nació El Ganso y le siguieron otras compañías como Scalpers o Silbon. En 2015, tras varias diferencias con sus socios, Ruiz de Terry abandonó Scotta y fichó por Scalpers para crear el departamento de compras, y dos años después, se puso al frente del departamento de moda masculina.

En el ámbito del diseño, el directivo es enemigo de la comodidad. “Todo lo que sea aletargarte en ella, te perjudica”, sostiene el creativo. “Todo es un estímulo -asegura Ruiz de Terry-; en el momento de la pandemia, cuando todos estábamos encerrados en casa, el equipo de diseño conseguimos crear una colección que recibió aplausos, todavía lo recordamos”.

Sin embargo, al diseñador tampoco le gusta recrearse en las victorias, ni siquiera habiendo sido uno de los artífices de unos de los últimos fenómenos de la moda masculina en España, Scalpers, que apunta a cerrar 2022 con unas ventas de más de 160 millones de euros: “en el momento en que te sientas sobre tu ego y sobre tu éxito, es cuando estás muriendo”.

“Diseñamos sabiendo qué tipo de producto necesita la tienda”

Para Scalpers el diseño “tiene un rol fundamental”, sostiene el creativo. “En cuanto a producto, al ser una cadena, todo los que son básicos, se pueden encontrar en otros sitios, pero lo que eleva la colección son los diseños, que para nosotros es muy importante”, añade Ruiz de Terry, que asegura que hay productos, como las camisas Oxford, “que cambian poco”, así que “donde más nos enfocamos es en otras categorías como jerséis, camisas o parkas”.

Cada vez más, el departamento de diseño se ajusta más a otras áreas de la empresa, como compras o finanzas. “Nosotros siempre somos conocedores de todo lo que ocurre, somos la cocina, y tenemos que saber con qué ingredientes vamos a cocinar, igual que tenemos que saber que no podemos diseñar artículos que luego no se pondrán vender”, argumenta Ruiz de Terry, que añade que “en Scalpers somos muy analíticos, no nos montamos películas, diseñamos en función de los productos que necesitamos meter en la tienda, y aunque no nos podemos coto, sabemos en qué campo nos tenemos que mover”.

Una de las capacidades fundamentales que tiene que tener un diseñador, según Ruiz de Terry, es conocimiento sobre el negocio. “No es que el negocio tenga que contaminar a la parte creativa, pero es fundamental que estén engranados, sobre todo en una gran empresa, donde es muy difícil abstraerse en lo que ocurre en el negocio”, indica.

“Me parece bastante complicado diseñar a base de algoritmos, se pierde el punto de frescura” 

La experiencia del día a día también aporta ese conocimiento, según el diseñador. “A la hora de analizar al cliente, acabas entendiendo de negocio, del rango de precios donde se siente cómodo, y creamos a partir de eso”, agrega.

La creatividad, es con todo, el pilar, y se ancla en la inspiración. Diseñar a partir de datos, como hacen compañías como Shein, es algo inimaginable para Ruiz de Terry. “Hace falta ese punto de creatividad que tienes que tener por la propia inspiración, casi la mitad de las mejores prendas y los diseños más frescos vienen de viajes, de películas y de libros; no digo que no sea acertado diseñar en base a algoritmos, porque puedes llegar a parte de tu público, pero pierdes ese punto de frescura”, reflexiona. Llegar a todo el mundo tampoco está dentro de los objetivos de Ruiz de Terry ni de Scalpers.

El cliente es, precisamente, otra de las figuras sobre las que piensa Ruiz de Terry cuando se enfrenta a una hoja en blanco. en el estudio “Es una conversación bidireccional, aprendemos mucho de ellos y nos vamos adaptando a lo que quiere, lo que nos permite que luego nos adelantemos nosotros”, explica.

Además de Scalpers, el directivo se ha embarcado ahora en una nueva aventura: Mr. Velous, una compañía de calzado que ha lanzado de la mano de su esposa, Marta Salvador, y de la que es director creativo, función que compagina con su puesto en la empresa de moda masculina.